Vender un millón de discos sería un éxito para cualquier artista principiante, pero en el caso de Ricky Martin, una cifra así es sinónimo de fracaso. Así de duro está el panorama para el puertorriqueño hoy, día cuando se lanza su nuevo disco Almas del silencio .
El álbum es el primero de Martin en su idioma natal en cinco años, y significa mucho más que su regreso al medio artístico pues su funcionamiento dependerá en gran parte de la sobrevivencia de Ricky en el competitivo medio de las estrellas pop.
Después de tocar el cielo en 1999 con su exitoso crossover al mercado anglosajón, el boricua ha visto cómo su popularidad bajó en los últimos años, en parte por errores en la promoción de su música y en parte por un cambio en el gusto del público.
Por eso, antes de fajarse con las audiencias internacionales, Ricky prefirió apostar esta vez por el público latino que lo conoce desde que era un niño y estaba en el grupo Menudo. Como era de esperarse, para Almas del silencio Martin buscó la ayuda de algunos de los nombres más grandes de la música en español.
Unión de gigantes
Reunir a Juanes, Estéfano, Emilio Estefan, Franco De Vita, Jon Secada, Alejandro Sanz y Ricardo Arjona en un solo disco parece una tarea imposible para cualquier simple mortal, pero no para Ricky Martin. Todos ellos tomaron parte en la elaboración de Almas del silencio .
De los 12 temas incluidos en el disco, Martin solo participó en la composición de uno, mientras que el resto fueron encargados a sus amigos: Juanes escribió Si tú te vas ; Arjona se fajó con Asignatura pendiente ; Estefan fue el cerebro detrás de Si ya no estás aquí y Jamás ; Secada escribió y grabó los coros de Juramento ; el premiado Estéfano creó Y todo queda en nada , y Sanz fue el responsable de Almas del silencio , el tema con el que cierra el álbum.
Aparte de todos ellos, Martin volvió a confiar en la pluma de Franco De Vita, después de que el venezolano le quedara a la altura con Vuelve , aquella exitosa canción que el puertorriqueño grabó en 1998. En esta ocasión, Franco escribió para Ricky Tal vez , la balada que se usó de punta de lanza para la promoción del nuevo álbum.
Sin embargo, de todos los participantes en Almas del silencio , quizás el menos conocido y el más importante fue Tommy Torres, un joven cantautor a quien se le vio aquí en la Teletón del 2001.
Dado que Martin decidió romper su larga relación con su amigo y productor Robi Rosa, Torres fue elegido como productor artístico del nuevo disco, tarea que lo llevó a participar en todos los temas como productor, arreglista, corista y músico.
Con todo
En una época cuando las ventas de discos van en picada, por efecto de la piratería y la música en línea, Sony Music cifra muchas esperanzas en Almas del silencio , uno de los mayores lanzamientos de la compañía para este año.
José Cañas, encargado de prensa de la discográfica, explicó que el disco se promocionará de manera intensiva y que, incluso, se efectuarán concursos entre aquellas personas que adquieran el álbum, el cual está en las tiendas nacionales a partir de hoy.
"Con este disco estamos tirando a matar", advirtió Cañas.
Lo que no está muy claro es qué fue lo que pasó en estos años con la que parecía una de las carreras más prometedoras de la música latina. Aunque las causas de los fracasos de Sound Loaded y La historia los dos últimos discos de Ricky no han sido abordadas por el artista, en la industria musical se asegura que varios errores de promoción fueron los responsables del desastre.
Después de los siete millones de copias que el álbum Ricky Martin vendió tan solo en Estados Unidos, y de los primeros lugares de bombazos como Liviní la vida loca , Bella y Shake Your Boom-boom , se esperaba que el siguiente disco en inglés del artista siguiera la misma senda, pero nada de eso pasó.
La producción Sound Louded , del 2000, se quedó sin gasolina casi en el arranque y con costos colocó dos millones de copias, mientras que su tema más fuerte, She Bangs , fue incapaz de entrar a los 10 primeros puestos del listado de la revista Billboard .
Cuando el dueto con Christina Aguilera, Nobody Wants to be Lonely , se disparó en las listas, los fanáticos corrieron a las tiendas para llevarse la decepción de que la versión con Aguilera no se incluyó en los primeros tirajes del disco.
Asustada por la corta vida del Sound Loaded , la discográfica lanzó La historia , una recopilación con los grandes éxitos del artista y que a los ojos de muchos parecía muy pronta. Pese a que la colección fue bien recibida, tampoco tuvo la fuerza para mantener viva la rickymanía .
Evolucionar
El mercado en inglés cambió en estos años en que Ricky se dedicó a hacer meditación y a visitar la India: compinches suyos como Aguilera optaron por una imagen más "sucia"; las llamadas boybands se vinieron en picada y una nueva generación de jóvenes cantautores llegó a demostrar que no se necesita bailar para ganarse a los adolescentes.
Por todo lo anterior es que Martin vuelve a apuntar a Latinoamérica, un mercado que siempre le ha sido fiel y que vio con ojos enormes como el chiquito de Menudo se convertía en una estrella mundial.
Según Angelo Medina cerebro detrás de la carrera del boricua su pupilo quiso grabar en español pues ahora son muchos los cantantes latinos que buscan hacerse un campo en el mercado estadounidense. "El disco viene mitad baladas y mitad temas movidos, relacionados con las raíces de Puerto Rico", aseguró Medina en una entrevista.
Al oír el álbum se nota una fuerte influencia de la música colombiana y árabe, y la inclusión de percusiones y cuerdas muy trabajadas que desplazan a las orquestas de viento que fueron el sello de los últimos éxitos bailables de Martin como Liviní la vida loca y She Bangs .
Además, Ricky también intervino su imagen y dejó los pantalones de cuero. A sus 31 años, el intérprete presenta una imagen más clásica, que algunos han calificado de similar a la de James Dean.
La espera ha sido mucha, y, a partir de hoy, Ricky tiene la oportunidad de demostrar que sigue siendo una estrella, no cualquiera, sino de las que es capaz de vender más de un millón de copias. El reto pinta enorme.