The New York Times Syndicate.
Viendo las cosas en retrospectiva, Lucy Liu sonríe tristemente por lo cerca que estuvo de perderse uno de los papeles más intensos y emocionalmente devastadores que haya interpretado, el que interpreta en la película 3 Needles , un drama épico acerca de la mortandad que está causando el sida en todo el mundo y que se estrenó en Estados Unidos el día primero de diciembre.
“Thom Fitzgerald, el escritor y director, me envió el libreto y me dijo que quería que yo interpretara a una mujer que recoge sangre en las aldeas chinas, la cual termina en el mercado negro”, recuerda Liu. “Pero no me convenció. Decidí tratar de persuadirlo de que elevara sus ambiciones”, agrega.
Durante un año de conversaciones, Liu y Fitzgerald crearon a Jing Ping, una mujer embarazada y personaje central de una de las tres historias que constituyen la película, las otras dos se desarrollan en Canadá y en Sudáfrica.
Jing esparce el sida sin querer, a través de sangre contaminada con VIH, sin darse cuenta de que ella misma está infectada.
“Ella no se enfrenta a la responsabilidad de lo que está haciendo hasta el final” dice Liu. “Pero ya no tiene dinero y está siendo chantajeada, así que está acorralada. Ella tiene la enfermedad, pero no sabía lo que era”.
Liu – quien interpretó el papel en mandarín, el idioma que como hija de inmigrantes sigue usando con sus padres– dice que no tuvo problemas para entender el velo de ignorancia y negación que ha permitido que se difunda el sida entre los aldeanos chinos.
“China es una nación empobrecida en muchos sentidos”, dice la actriz. “Es muy difícil educar a la gente, pues el gobierno difunde la información sólo cuando quiere. Hay una barrera muy gruesa de ignorancia entre la población”.
Y agrega que siente una conexión personal con esa falta de conocimiento que existe.
“He conocido personas que apenas han tenido relaciones sexuales y ya tienen sida”. asegura. “Conocí a alguien que lo tenía y, en ese tiempo, ninguno de nosotros sabía realmente qué era. Él estuvo muy enfermo en el hospital por mucho tiempo”, cuenta.
“Ahora toma cocteles de drogas, pero lo irónico es que en un principio no sabíamos qué era. Es como algo que no nos pasa a nosotros ni a la gente que conocemos ... Le sucede a los demás”.
“Pero en todo el mundo la gente se está muriendo de sida, especialmente en África, donde nadie se sorprende de que alguien se enferme y muera de sida ... simplemente, así son las cosas”.
Liu demostró sus habilidades en las artes marciales en Charlie's Angels (2000) y Kill Bill (2003), pero en 3 Needles la llamaron para expresar desamparo y vulnerabilidad: Jing es violada por unos soldados y, sin dinero para el hospital, se enfrenta al parto de su hijo sola en el campo.
“La escena del parto fue un despertar”, dice la actriz.
“No sé cómo describirlo pues es inexplicable. Sentí que me liberaba de cosas con las que había estado cargando emocionalmente. Dar a luz es una cosa hermosa, aunque una misma tenga que cortar el cordón umbilical con los dientes. Cuando hice eso, pensé: Dios mío, esto es muy crudo. Pero de esa desesperación surgió una cosa maravillosa, pues es un milagro poder tener un hijo”.
Sin embargo, Liu no tiene hijos y no tiene planes de asentarse, por lo menos por el momento.
“Mis padres sabían que yo no iba a seguir el sendero tradicional” , narra Liu con convicción.
“Mi sueño siempre ha sido seguir trabajando como actriz, tener éxito y tener relaciones sólidas” , continúa. “Pero nunca asentarme. Tengo muchas amigas y familiares que no tienen trabajo, viven en su casa y son madres y amas de casa, lo cual es increíble.
“Estoy muy feliz con lo que soy”, concluye. “Y pienso que cuando me llegue el momento de asentarme, lo tendré muy claro”.
Liu señala que con frecuencia se sorprende de lo muy conocida que se ha vuelto. Incluso en la pequeña aldea de Tailandia, donde se rodó el segmento chino de 3 Needles , ella era reconocida como una estrella.
“Estaba en medio de la nada y no pensé que nadie fuera a reconocerme. Traía el pelo hecho una desgracia, no llevaba nada de maquillaje y llevaba el vientre falso de embarazo. Pero de pronto llegó corriendo un grupo de chiquillos. Traían sus DVD de Charlie's Angels y Kill Bill que, por supuesto, eran piratas. Y allí estaban todos, alargándome esos discos piratas para que se los autografiara.
“Es sorprendente el poder del cine y el poder de la televisión ... ¡tienen tanto alcance!”.
Y a Liu no le da pena usar ese poder para hacer que la gente ponga atención a los problemas mundiales que le llegan al corazón, como las desdichas de los niños, desde los huérfanos hasta las víctimas de la guerra, que ella ha conocido de primera mano en sus viajes por todo el mundo como embajadora de buena voluntad de UNICEF.
“Empiezo a darme cuenta de lo conectados que estamos”, dice. “Las pesadillas que están ocurriendo en África en estos momentos son muy importantes para lo que nos vaya a suceder en el futuro. Es como si estuviéramos en un bote y alguien le hiciera un agujero. Tenemos que darnos cuenta de que, cuando se empiece a hundir, nos vamos a hundir todos juntos”, aduce Liu.
Lo único que preocupa a Liu, en lo relativo a los personajes famosos que apoyan las causas en las que creen, es su temor de que la gente común y corriente piense que no es tan importante como para que su participación sea algo positivo.
“No hay que ser una celebridad para hacer algo positivo”, insiste la actriz. “Podemos participar donando dinero, pero también podemos participar informándonos sobre el problema y después usando ese conocimiento para involucrarnos”.
Liu, que aceptó una rebaja sustancial en su paga y se abstuvo de exigir los beneficios adicionales que habitualmente se otorgan a las estrellas para hacer 3 Needles no va a abandonar Hollywood ni las películas ligeras alejadas de los problemas sociales.
Pronto la veremos en una loca comedia, Code Name: The Cleaner, estelarizada al lado de Cedric the Entertainer.
“Después de hacer algo tan dramático, fue muy bueno estar en lo que yo llamaría una comedia sin complicaciones”, explica. “Y Cedric sencillamente es un dulce. Yo me divertí muchísimo”.
Pero la actriz sí espera que la más seria 3 Needles encuentre un público, tanto en los cines como en la televisión. El show time se transmitió el primero de diciembre con motivo del Día Mundial del sida.
“Ahora, constantemente nacen niños con VIH y sida”, dice Liu. “Quizá nos sintamos protegidos, pero no lo estamos. Tenemos que ensuciarnos las manos. Tenemos que ponernos de rodillas y rascar en la tierra, aunque no veamos el fin del sida en nuestra vida. Pero si no empezamos hoy, todo se va a desplomar a escala global”.