Nueva York . El rey del pop, Michael Jackson, ganador de múltiples álbumes de platino y que ya estaba involucrado en una disputa con su sello, acusó el sábado pasado a la industria discográfica de conspirar para obtener ganancias a costa de sus artistas, y en particular de sus artistas minoritarios.
"Las compañías disqueras realmente conspiran contra los artistas", dijo Jackson en una desusada presentación pública. "Los sellos roban, engañan, hacen todo lo que pueden, especialmente contra los artistas negros", añadió.
Jackson, de 43 años, que comenzó su carrera discográfica cuando era un niño, habló en Harlem ante una reunión de la Red de Acción Nacional, grupo dirigido por el pastor protestante Al Sharpton.
Jackson se ha aliado con Sharpton y el abogado Johnnie Cochran, quienes han creado un panel destinado a investigar si los artistas están siendo explotados por los sellos disqueros.
Bien forrado
El artista llegó en una limosina a las oficinas de Sharpton en el norte de Manhattan vestido todo de negro, con gafas de sol y guantes también negros. Pese a que hacía buen tiempo, Jackson llevaba consigo una sombrilla.
El cantante, presentado por Sharpton como el artista negro que más discos ha vendido en el mundo, fustigó duramente a la industria discográfica y en particular al presidente de Sony Music, Tommy Mottola.
El artista dijo que Mottola, esposo de la estrella mexicana Thalía, era un individuo "malvado, racista y muy, muy diabólico".
Jackson dijo además que Mottola utilizó palabras despectivas al referirse a un artista negro de Sony.
El sello Sony estaba cerrado, y un mensaje telefónico para pedir comentarios no fue respondido de inmediato.
Las ventas del último álbum de Jackson, titulado Invencible , han resultado decepcionantes según las cifras del propio sello. Pese a las afirmaciones de Jackson, Sony dijo haber gastado unos $25 millones en la promoción de Invencible , disco que tardó cinco años en gestarse y grabarse.
Jackson mencionó a varios artistas en su lista de víctimas de la industria, entre ellos James Brown, Mariah Carey y Sammy Davis Jr. De este último dijo que había muerto sin un centavo.
"A fin de sobrevivir, muchos artistas están siempre de gira porque, si dejan de hacer giras, pasan hambre", dijo Jackson, que posee -según se afirma- uno de los contratos más lucrativos de la industria discográfica. "Tenemos que poner fin a esta increíble injusticia", agregó.
Al concluir la reunión, Jackson se entrevistó privadamente con Sharpton y luego volvió a su limosina entre los vítores de la muchedumbre.