La industria de Hollywood llora la pérdida del actor Víctor Mature, considerado el primer "tipazo" de la historia del cine porque su presencia física siempre sobresalió más que sus dotes artísticos.
Aunque gran parte de su filmografía ha quedado enterrada en el olvido, la muerte de este actor de 86 años devuelve a la memoria sus músculos, su fortaleza y algunas de sus obras más memorables como Sansón y Dalila y My darling Clementine.
Mature falleció el miércoles como consecuencia del cáncer con el que había luchado estos tres últimos años y contra el que no sirvieron ni su estatus de estrella, ni la musculatura que le hizo famoso en la pantalla.
La muerte fue a buscarle a su rancho Santa Fe, en las proximidades de San Diego (California), donde decidió retirarse de los lujos de Hollywood hace más de 30 años. Se dedicó a los negocios inmobiliarios para hacer más dinero y a la práctica del golf para mayor diversión.
Belleza y ambición
La llegada de Mature al mundo del cine desde su Louiseville natal (Kentucky, Estados Unidos) nunca pareció muy esperanzadora. Era, en principio, una nueva cara bonita en una industria de estrellas donde debutó con la poco prometedora película The housekeeper's daughter.
Sin embargo, este actor moreno y de pelo rizado, hijo de inmigrantes austríacos, quedó convertido en el primer "tipazo" de Hollywood, donde pasó a ser conocido como "beefcake" (pastel de músculos) gracias a su trabajo en Sansón y Dalila.
Este épico dirigido por Cecil B. DeMille en 1949 puso su talento, sus cabellos y su musculatura a los pies de Hedy Lamarr -junto a quien protagonizaba la cinta- y a los del público en general, convirtiéndole en una estrella.
En total interpretó 72 largometrajes, interesándose por géneros tan diversos como las películas de romanos, las del oeste o las de cine negro, aunque su especialidad serían aquellos papeles en los que necesitara quitarse la camisa para enseñar su fisonomía.
A Mature, considerado uno de los actores más afables de la década de los 40 y 50, nunca pareció importarle mucho que su apariencia física se interpusiera en sus habilidades interpretativas.
De hecho, en numerosas declaraciones aseguró que su interés por el cine era meramente económico, algo que demostró al retirarse a los 45 años para dedicarse al negocio inmobiliario.
Mature incluso llegó a decir en una ocasión, cuando fue rechazado de un club social por ser actor, que no era cierto que fuera actor y que tenía más de 70 películas para demostrarlo.
Pese a los comentarios sobre su musculatura, los críticos reconocieron su trabajo en películas como Kiss of death o My darling Clementine como algunas de sus mejores actuaciones.
Su belleza también le abrió muchas otras puertas y, según las leyendas de Hollywood, Mature será recordado como uno de los actores mejor dotados sexualmente. Esto lo convirtió en un cotizado galán de cine que en la vida real flechó a como Betty Grable, Rita Hayworth o Lana Turner.
Casado en cinco ocasiones, su última esposa, Lorey Mature, es una cantante de ópera retirada, camino artístico que sigue la hija de ambos, Victoria.
A pesar de su apariencia de hombre fuerte, la sencillez de Mature también ha dado lugar a algunas de las anécdotas más divertidas entre los héroes de la pantalla. Se negó, por ejemplo, a luchar con un león durante el rodaje de Sansón y Dalila, "no quiero ser el primer actor devorado por un felino desdentado", dijo.
Una vez retirado, Mature se dedicó a jugar al golf, deporte que practicaba seis días a la semana, y solo dejó su vida relajada en contadas ocasiones, siendo una de ellas la nueva versión de Sansón y Dalila para televisión donde los años le obligaron a ser el "padre del forzudo".