La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) postergó ayer hasta el 2015 el eventual inicio del proceso para recibir a Costa Rica, pero decidió invitarlo a prepararse.
La medida cambia la situación anterior en la que Costa Rica tenía apenas una petición para ser recibido, pero no llena la aspiración de ser invitado a iniciar de inmediato todo lo relacionado con el proceso de admisión, como se hizo con Colombia y Letonia.
El Gobierno, sin embargo, catalogó el acuerdo del Consejo de la OCDE como un reconocimiento al avance del país en diversos campos, como la transparencia fiscal, la liberalización del comercio, la educación, entre otros.
Ahora, Costa Rica tiene, desde ayer, como elementos nuevos, un anuncio de repercusión internacional y definirá una hoja de ruta conjunta con OCDE.
La presidenta de la República, Laura Chinchilla, habló de que se trata de un gran reconocimiento a la democracia, al desarrollo humano y al desarrollo ambiental del país, luego de conocerse la noticia en la mañana de ayer.
El politólogo y relacionista internacional, Guillermo Barquero, llamó a la mesura. “La noticia hay que tomarla con prudencia, en su justa dimensión. Yo no me sobreexcitaría”, enfatizó.
Agrego que ahora hay que ver los requisitos, los cuales podrían incrementarse a la luz de acontecimientos recientes, que son complicados.
La decisión de ayer de la OCDE se da mientras hay denuncias del uso del país para el supuesto lavado de dinero, denuncias del tráfico de órganos y cuando el Gobierno afronta crecientes críticas.
Juan Ramón Rivera, presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica, dijo que los procesos de admisión en la OCDE son largos y que esperar al 2015 no es, por lo tanto, un gran desplome.
La OCDE es una organización intergubernamental internacional, que promueve una economía mundial más fuerte, más limpia, y más justa mediante acciones tales como el desarrollo de mejores prácticas en políticas públicas y la promoción de una mejor gobernanza.
Trabajo. La ministra de Comercio Exterior (Comex), Anabel González, y la presidenta Chinchilla, advirtieron de que ahora se abre un proceso de mucho trabajo para cumplir con una agenda que se acordará con la Organización.
En la tarde de ayer, en París, donde se encuentra la ministra González, dijo que se reunió con el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, para iniciar la definición del plan para Costa Rica. “Lo importante aquí es que se da una especie de banderazo de salida. Cuánto se avanza y en dónde depende del esfuerzo de Costa Rica”, declaró González.
La hoja de ruta no está acordada, pero González considera que puede incluir aspectos relacionados con comercio, inversión, generación de estadísticas, en crecimiento verde, innovación y ciencia y tecnología.
Los requisitos que pedirá la Organización dependen de las características de cada país, pues –por ejemplo– en el caso de Chile se le reconocieron avances en materia ambiental, pero se le dijo que su institucionalidad era deficiente. Por eso tuvo que crear un ministerio del ramo. Costa Rica, por ejemplo, ya tiene esa entidad.
De manera personal, González especuló en el sentido de que a Costa Rica se le pedirá mejorar la gestión para construir infraestructura o en los criterios para definir la estadística nacional, algo básico para generar políticas.