Orlando Bloom se hizo famoso por su papel de Légolas, en la película el Señor de los anillos , aunque ya llevaba tiempo dedicado a la interpretación.
Pero quizá los éxitos de la trilogía de Piratas del Caribe lo han colocado en un actor de moda.
En la tercera entrega vuelve a encarnar al pirata Will Turner. Junto con Elizabeth Swann (Keira Knightley) se han aliado con el Capitán Barbossa (Geoffrey Rush) con el desesperado objetivo de liberar al Capitán Jack Sparrow (Johnny Deep) de su terrorífica trampa en la bodega de Davy Jones.
Mientras, el escalofriante barco fantasma, El Holandés Errante y Davy Jones, en manos de la Compañía de las Indias, provocan el caos en los siete mares. Navegando por las aguas bravas y traicioneras, ponen rumbo a la exótica Singapur y se enfrentan a la astucia del pirata chino Sao Feng (Chow Yun-Fat). Más allá de los confines de la tierra, cada uno deberá elegir un bando en una titánica batalla final ya que no solo sus vidas y sus destinos penden de un hilo, sino también el estilo de vida de los piratas, sinónimo de libertad.
En la sangre. El sueño de Bloom había sido siempre ser actor. Nació un 13 de enero de 1977 en Kent Canterbury, una tranquila localidad inglesa.
El nombre de Orlando deriva del amor de sus progenitores por la música del compositor clásico Orlando Gibbons.
A su padre biológico, Colin Stone, lo conoció años después de la muerte de su padre legal, Harry Bloom, un novelista, abogado y activista político sudafricano, que luchó contra el apartheid en su país.
Su madre, Sonia, trabajó en una escuela de idiomas para estudiantes extranjeros. Podría decirse que Orlando Bloom es actor gracias a ella. Sonia fue quien les inculcó a él y a su hermana la pasión por las artes cuando eran pequeños.
Animado por su madre, Orlando empezó recitando poesía en festivales de su localidad. Y poco después, estando aún en el colegio, decidió que quería dedicarse a la interpretación.
A los 16 años se trasladó a Londres y se unió al National Youth Theatre , donde actuó durante dos temporadas. Más tarde consiguió una beca para estudiar en la British American Drama Academy .
Durante aquel tiempo acudió a multitud de castings ; eso le permitió hacerse con pequeños trabajos en la televisión británica y con un breve papel en Wilde (1997), con la que debutó en la gran pantalla.
Su carrera cinematográfica ya había empezado, pero aun así Bloom prefirió tomarse un tiempo para ampliar su educación. Así que se inscribió en la Guildhall School of Music and Drama de Londres, una prestigiosa escuela por la que también ha pasado gente como Ewan McGregor o Ben Chaplin.
Todavía estaba en la escuela cuando le surgió la posibilidad de presentarse al casting de El Señor de los Anillos , la trilogía que preparaba Peter Jackson sobre la obra de Tolkien. Bloom se presentó en un principio para el papel de Faramir, pero Jackson decidió ficharle finalmente para interpretar a Légolas.
Así que Orlando se convirtió en uno de los principales protagonistas de las tres películas: La comunidad del Anillo, Las dos torres y El retorno del rey . El gran éxito del proyecto logró que su nombre se volviera popular rápidamente y se convirtiera en una de las nuevas estrellas de Hollywood.
En una entrevista mencionó que “estoy muy agradecido de estar trabajando, de estar haciendo todas estas cosas. Son cosas grandiosas. Yo pienso que lo mejor para mí acerca de haber trabajado en El Señor De Los Anillos es que me impulsó directo a este foro, este gran foro (refiriéndose al de Piratas del Caribe ), el cual, si yo hubiera llegado al negocio del cine en cualquier otra película, hubiera sido totalmente diferente”.
Tras participar en El Señor de los Anillos , Orlando Bloom trabajó en otros tres proyectos destacados: el aclamado filme bélico Black Hawk , de Ridley Scott: las películas de aventuras Piratas del Caribe y la superproducción épica Troya , junto a Brad Pitt y Eric Bana.
Aunque es disléxico, ha asegurado que el problema era más grave en su infancia y que ahora solo es “medio disléxico”.
Durante muchos años fumó, pero cambió el hábito por el de comerse las uñas.
Adora los deportes de riesgo en los cuales ha salido mal parado en diversas ocasiones. Fue poco antes del rodaje de El Señor de los Anillos cuando Orlando tuvo un accidente que casi lo deja en silla de ruedas.
Tiene una gran cicatriz que atraviesa su espalda. Y es que Orlando cayó por una terraza de un tercer piso y se rompió la espalda. Cuando despertó en el hospital, el médico le comunicó que no volvería a caminar. Estuvo tres días intentando asumir lo que iba a ser su vida a partir de ese momento, pero una operación le devolvió sus planes. a los 12 días salió del hospital por su propio pie.
Además, se ha fracturado varias veces las costillas, el cráneo, la muñeca, un dedo de la mano, otro del pie, su nariz, ambas piernas y su brazo. Por eso lleva numerosos colgantes, amuletos, anillos y pulseras para que le acompañan durante el rodaje de sus películas.
De nuevo Will. Al preguntársele sobre cómo ha sido trabajar de nuevo en el papel de Will Turner en Piratas del Caribe 3 , menciona que “ha sido genial. Una de las mejores cosas como actor es trabajar en una película, en un proyecto en el que sientes que el público te responde. Además, el gran éxito de la primera parte fue emocionante y todo el mundo sabía que teníamos que superarlo”.
“Ha sido un trabajo muy duro. Es muy divertido, algunas partes más que otras, pero toda la parte más loca de la película supone mucho trabajo”, agrega.
No lejos de su papel romántico en la película Elizabethtown , junto con Kristen Dunst, Orlando ha sido novio de la actriz inglesa Joanne Morley, con quien estuvo durante un año. En 1997 rompieron al irse Joanne con uno de los mejores amigos de Orlando, el actor Andre Schneider.
Posteriormente, fue pareja de la rubia actriz Kate Bosworth ( Las reglas del juego ), con quien rompió a comienzos del año 2005.
Lo que si perdura es un nueve tatuado en su antebrazo derecho, y un sol en su torso (al lado del ombligo prácticamente) tatuado cuando solo tenía 15 años, según recuerda el famoso actor.