Lima. AFP. El expresidente Valentín Paniagua, quien lideró el gobierno de transición tras la renuncia de Alberto Fujimori en el 2000, falleció ayer de una afección cardíaca a los 70 años, generando tristeza en Perú, que siempre lo percibió como un hombre que ayudó a la reconciliación del país.
Paniagua estaba internado desde mediados de agosto en una clínica de Lima debido a una afección cardiaca que obligó a una intervención quirúrgica de urgencia, pero su salud se complicó en los últimos días con una infección pulmonar que finalmente le causó la muerte.
Tras conocerse su deceso, la bandera peruana fue colocada a media asta en señal de duelo en el Palacio de Gobierno, el Congreso y todos los edificios públicos.
“Se ha producido lo que todos temíamos, el deceso del doctor Paniagua”, dijo el excanciller Javier Arias, quien era su amigo personal y compañero en el partido centrista Acción Popular.
A su vez el primer ministro Jorge del Castillo se declaró “consternado” por el fallecimiento del exmandatario, señalando que jugó un “papel fundamental” en mantener vigente la democracia en Perú.
Mano firme. El presidente Alan García suspendió sus actividades oficiales para presidir los funerales. “Valentín Paniagua supo llevar al país con mano firme hacia la reconstrucción de la democracia. Está en la historia y debe ser un ejemplo señero para las futuras generaciones del país”, dijo del fallecido.
La salud de Paniagua era motivo de preocupación en Perú desde hace meses, sobre todo después de que uno de sus cercanos amigos anunciara su muerte el 24 de agosto en el plenario del Congreso, inmediatamente desmentida.
Paniagua, un político centrista, dirigió el gobierno de transición entre noviembre del 2000 y julio del 2001 y aseguró una transición ordenada y sin sobresaltos al producirse el desplome del régimen fujimorista (1990-2000) en medio de un escándalo de corrupción.
Desde París, el exsecretario general de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, quien fue primer ministro en el gobierno de Paniagua, dio un mensaje.
“Perú pierde a uno de sus mejores valores, fue un hombre de una extraordinaria calidad en lo humano e intelectual y aseguró una transición a la democracia que fue absolutamente impecable”, dijo.
El Congreso peruano le rindió un sentido homenaje en medio de dolor y lágrimas, que recordó que el desaparecido político fue dos veces diputado y presidente del legislativo cuando se desplomó el régimen fujimorista en medio de un escándalo de corrupción.
“El Congreso te rinde el homenaje que se le da aquellos peruanos ilustres”, dijo la presidenta del Parlamento, Mercedes Cabanillas.