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La primera pregunta que se hicieron los responsables del rodaje de la película El orfanato fue: ¿por qué regresa Laura a la casa donde creció de niña? Ahí estaba la clave de todo.
De esa manera, según coinciden el guionista y el director, El orfanato se convirtió en un viaje hacia atrás en el tiempo –una regresión– un retrato psicológico de alguien que se aferra al pasado para escapar del presente.
Sergio G. Sánchez, guionista, se refiere así al hecho de que su primer guion sea una película de terror, dice: “Supongo que es una cuenta pendiente con mi infancia; sin querer me ha salido una película como las que a mí me entusiasmaba ver de pequeño, películas como Poltergeist , La profecía o El bebé de Rosemary , con las que destrocé los cabezales del primer VHS que hubo en la casa de mis padre”.
El argumento de la película sigue a Laura, mujer que regresa con su familia al orfanato donde creció. El nuevo entorno despierta la imaginación de su hijo Simón, quien comienza a dejarse llevar por juegos de fantasía cada vez más intensos. El personaje de la madre se convierte en el eje de los sucesos en El orfanato .
De ahí la validez del trabajo actoral de Belén Rueda como Laura, actuación eximia.