Las probabilidades de que un niño en pobreza no tenga libros en su hogar es mucho más alta que la de uno del quintil de mayores ingresos.
El escenario ideal para un parlamento nacional es contar con un sólido departamento de biblioteca y servicios de estudios parlamentarios independiente de los partidos y del gobierno.
Las mujeres no somos una versión más pequeña de los hombres ni somos una desviación del estándar de la humanidad.
El votante crítico es la excepción; abundan los hinchas políticos identificados ciegamente con sus ídolos.
El contexto en el que se desenvuelve cada persona tiene una incidencia determinante en el proceso de alfabetización.
Las personas y naciones no debemos resignarnos a ser espectadoras y, menos aún, fichas instrumentales del ajedrez tecnológico cambiante, invasivo y multidireccional.