Walter Gerardo Morales Ruiz, de 30 años, murió este miércoles de múltiples disparos, sentado en su propio vehículo en Santa Rosa de Limón.
Fueron los vecinos de la comunidad los que llamaron a las autoridades asustados por la gran cantidad de balazos que escucharon a eso de las 11:40 p. m. Sin embargo, cuando llegaron los cuerpos de socorro, Morales, conocido como Pipo, ya estaba fallecido. Él presentaba impactos de bala en brazos, tórax y cabeza.
Una mujer que solo se identificó como Isaura, vecina de La Aurora, en Santa Rosa, detalló que ella estaba amamantando a su bebé cuando escuchó entre 10 y 12 detonaciones. En un principio pensó que eran bombetas, pero luego se percató que eran los balazos, por lo que ni siquiera se atrevió a asomarse por la ventana y fue hasta hoy que confirmó el homicidio.
Según la lugareña, quien tiene seis años de vivir en la zona, ella no está acostumbrada a escuchar detonaciones en ese barrio, al que califica de muy tranquilo. La Policía Judicial agregó que se trata de una zona muy solitaria.
De momento se desconoce cuál fue la dinámica del crimen y quién o quienes podrían ser los responsables en este caso.
Morales era soltero, sin hijos, oriundo de Limón y vecino de barrio Limoncito, en el cantón que es cabecera de la provincia caribeña.
Según el expediente N.° 13-000053-1109-PE, mediante sentencia del 26 de abril del 2013, el Tribunal Penal de Flagrancia de Puntarenas había condenado a Morales Ruiz a cinco años de prisión junto con otros dos sujetos por un robo agravado que perpetraron en esa provincia.
Esa vez el ofendido, un menor, indicó que los sujetos le dieron un empujón por detrás, de modo que cayó sobre una de las bancas del parque. También relató que fue para robarle una gorra y otros bienes. Esa vez lo amenazaron con pegarle y uno ellos incluso le preguntó de forma intimidante qué llevaba con él, haciendo referencia a una camisa que el ofendido tenía en una bolsa. La rápida detención de los imputados se logró gracias a la descripción que brindó el denunciante, dice la sentencia.
Otro homicidio en Batán
En tanto, este jueves, pero a eso de las 3 p. m., los familiares de un joven de 25 años lo encontraron asesinado en un canal de desagüe de unos 50 centímetros de profundidad la finca bananera de un allegado, en Batán de Matina, Limón.
Según información de una fuente policial, a la víctima la taparon con hojas de banano y tiene una grave herida en su cuello que le provocó un sangrado abundante. Su identidad no ha trascendido.
Al sitio, en Sahara de Batán, llegaron oficiales de la Fuerza Pública para custodiar la escena mientras asumen los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Limón es la segunda provincia con más homicidios en lo que llevamos del año, pues registra 26 crímenes de ese tipo. Solo superada por San José, con cuatro más.
Colaboraron en esta información los corresponsales Raúl Cascante y Reiner Montero.