Manuel Tovar Rivera, exrepresentante de Costa Rica ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), fue anunciado este viernes 22 de abril como el nuevo jerarca del Ministerio de Comercio Exterior (Comex), en el gobierno del presidente electo Rodrigo Chaves. Este exlegionario quien en su perfil del Twitter se autodenomina como un “ciudadano global”, ocupará el cargo a partir del próximo 8 de mayo.
LEA MÁS: Gabinete de Rodrigo Chaves: Presidente electo anuncia los primeros 10 nombramientos
Tovar, hoy de 48 años, ocupó la máxima representación del país en la OCDE, con sede en París, Francia, entre enero del 2016 y setiembre del 2021, sin embargo, cuando inició en el cargo no era un recién llegado. Antes de ser designado como embajador fungió como enviado especial ante dicha organización, desde el 2013 hasta diciembre del 2015, así que en esta misión le correspondió abrir la oficina de intereses de Costa Rica para Asuntos OCDE y desempeñar una labor de cabildeo que condujo a la invitación formal para iniciar las negociaciones de adhesión.
El próximo titular de Comex muestra entre sus atestados una nutrida experiencia en negociaciones comerciales. Antes de desembarcar en París, entre 2008 y 2012, estuvo como agregado comercial de la Embajada de Costa Rica en el Reino de Bélgica, el Gran Ducado de Luxemburgo y fue Enviado Especial en la Misión de Costa Rica ante la Unión Europea en Bruselas. En esta última encomienda fue negociador del Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea (AACUE).
Desde el 2005 y hasta su partida a Bruselas fue negociador comercial del Comex, responsable de los portafolios de solución de controversias y asuntos institucionales, así como coordinador de relaciones comerciales con Canadá y Chile bajo el marco de los tratados de libre comercio.
Luego de su salida de la OCDE, en una entrevista con La Nación, en noviembre del 2021, este abogado de profesión resaltó que Costa Rica debe moverse a una velocidad mucho mayor en las reformas que necesita, recuperar la vocación de inserción en la economía global y prepararse para competir en un escenario mundial diferente, amparado en sus ventajas competitivas.
También denunció un sesgo proteccionista en la reciente política comercial de Costa Rica. “Por ejemplo, el país ha tomado un curso proteccionista comercial en los últimos años que nos ha dañado la reputación que teníamos como uno de los mejores alumnos en el sistema multilateral del comercio. Hemos sido demandados por algunos socios, por ejemplo, el tema del aguacate, pero hemos dado las espaldas a una incorporación a un bloque tan importante como la Alianza del Pacífico”, expresó durante la conversación con este medio, en el 2021.
Luego añadió: “¿Por qué no pensar en incorporarnos al APEC (Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico), al acuerdo comprensivo transpacífico CPTPP? Hay muchas iniciativas. Hay una iniciativa muy importante, el acuerdo general de comercio y género, en el cual socios estratégicos como Corea, Chile, Canadá, Nueva Zelanda, que son parte, nos han invitado, pero todavía tenemos la carta de invitación en la mesa y no hemos actuado”.
“...el país ha tomado un curso proteccionista comercial en los últimos años que nos ha dañado la reputación que teníamos como uno de los mejores alumnos en el sistema multilateral del comercio”
Además de los desafíos planteado por la pandemia sobre el comercio internacional y la disrupción en las cadenas logísticas, uno de los puntos más relevantes que tendrá sobre su escritorio el nuevo Ministro del Comex será administrar, en Costa Rica, la discusión del impuesto mínimo global del 15%, iniciativa que resurgió en abril del 2021 pero que andaba rondando los pasillos de la OCDE desde hace casi ocho años, por lo cual tampoco será un tema que le resulte nuevo.
En ese momento reconoció que del impuesto mínimo global, acordado por los países del G20, lo que está definido apenas son los principios, pero la negociación continúa, y por lo tanto llamó a trabajar para avanzar en las ventajas competitivas del país. El actual jerarca de Comercio Exterior, Andrés Valenciano, reconoció a La Nación, en marzo pasado, que efectivamente los pasos en esta discusión han sido mínimos por la falta de información.
No obstante, el futuro jerarca de Comex, en términos generales, ve el lado positivo de esta reforma tributaria para los países emergentes como Costa Rica, que tendrían la posibilidad de recaudar tributos que antes no ingresaban a sus arcas.
La medida del impuesto se estructura en torno a dos pilares: un impuesto a las sociedades mínimo del 15% para aquellas empresas que facturen más de 750 millones de euros anuales (unos $867 millones) y una medida para que los ingresos abonados por las grandes empresas lleguen a los países donde obtienen sus beneficios y no donde tienen su sede social.
“Nosotros solemos ser, a veces, hasta conformistas, y nos cuesta cambiar el statu quo, nos resistimos al cambio, se le teme a la reforma, y para mí, uno de los valores más importantes de la incorporación a la OCDE es, pareciera, que le hemos perdido el miedo a la reforma. Pero una cosa es hacer la reforma, una cosa es el papel”, planteó en dicha entrevista.
Y añadió que las economías y el mundo se mueven muy rápido, y la legislación, en Costa Rica, va mucho más lento. “Tenemos que sabernos mover en estas aguas y reformarnos y adaptarnos a una velocidad mucho mayor”, afirmó.
Nació en Barcelona, en 1974, es de nacionalidad costarricense y estudió Derecho en la Universidad Autónoma de Centroamérica. Cuenta además con una maestría en Derecho Internacional por la Universidad Complutense de Madrid y estudios de posgrado en Derecho Administrativo y en Ciencias Políticas por la Universidad de Salamanca.