Bled, Eslovenia. El majestuoso Lago de Bled destaca entre los principales atractivos de Eslovenia. Su belleza es impresionante.
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Quizás este país país de Europa Central no es tan concurrido, lo cual es una lástima debido a sus bellezas escénicas y precios atractivos en hospedaje, transporte y alimentación.
No obstante, si se anima a incluir Eslovenia en una visita a Europa, le doy algunas sugerencias para disfrutar al máximo del Lago de Bled.
Posiblemente su viaje inicie en Ljubljana, la coqueta capital de Eslovenia, conocida por ser la ciudad de los dragones. Aunque es pequeña, su centro histórico es envidiable y en la cima luce imponente el castillo.
Desde la estación de autobuses de Ljubljana, contigua a la estación del tren, parten los autobuses públicos hacia el Lago de Bled. Hay una boletería donde puede comprar el pasaje.
El bus tarda alrededor de una hora, pues realiza paradas durante el trayecto. Tome en cuenta que los domingos puede haber más pasajeros.
Lo ideal es pasar al menos una noche en Bled, el pueblo a orillas del lago. Ofrece diversas opciones de hospedaje según su presupuesto. Esto le permitirá disfrutar más de las actividades de la zona.
Primero puede descubrir el pueblito de Bled, con su iglesia, castillo y zonas verdes. Luego, puede caminar alrededor del lago, en un trayecto plano de unos seis kilómetros, lo que le permitirá apreciar más esta belleza natural.
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Dependiendo de la época del año en que vaya, hay sectores del lago donde se puede bañar. También, puede pagar un tour a la isla central del lago, donde está la Iglesia la Asunción.
En una de las colinas cercanas al lago, puede subir en telesilla y bajar en un tobogán. El costo son €10 por persona.
En Eslovenia la moneda es el euro; los costarricenses no necesitamos visa al ir como turistas. Además, es parte del Espacio Schengen de libre circulación.