En Facebook y Google Reviews las quejas hacia los taxis anaranjados del aeropuerto Juan Santamaría son muchas. La denuncia reincidente de los viajeros en redes sociales es que el servicio es muy caro. Más caro que los taxis rojos y bastante más caro los Uber, todavía ilegales en Costa Rica y con casi 20.000 conductores dando el servicio.
Pero hay una razón para que su precio sea elevado y hay una razón por la que estos taxis son los únicos autorizados a trabajar en el perímetro del aeropuerto. Aquí te lo explicamos todo.
Antes de seguir, aprendamos juntos este vocabulario porque nos será útil:
Licitación: Acción y efecto de licitar.
Licitar: Participar en una subasta pública ofreciendo la ejecución de un servicio a cambio de la obtención de dinero u otros beneficios.
Concesión: Acto administrativo que implica el otorgamiento del derecho de explotación o gestión, por un período determinado, de bienes y servicios por parte de una administración pública o empresa a otra, generalmente privada.
Cómo nacieron los taxis anaranjados
El servicio de taxis en el aeropuerto ya existía en los años 50, cuando la terminal aérea de San José estaba en el parque metropolitano La Sabana, en San José.
Manuel Vega, director del Consejo de Transporte Público (CTP), nos explica que entonces los taxistas trabajaban solo con permisos.
En 1958, cuando el aeropuerto se mudó a Alajuela, esos mismos taxistas se trasladaron y continuaron dando su servicio en los 60, 70 y 80. Según Vega, estos taxistas decidieron llamarse Taxis Unidos.
En aquellos años hubo un proceso de licitación, pero cuando venció, una resolución de 1991 les permitió a los taxistas continuar el servicio bajo la figura del “permiso” hasta que hubiera otro concurso.
La nueva licitación llegó en 2011 y es la misma que está vigente hoy. Se licitaron 100 placas oficiales para taxis de aeropuerto, pero con algunos reclamos administrativos, terminó en 107 placas por disposición del Tribunal Administrativo de Transportes.
Hoy existen 107 placas en concesión en manos de personas particulares.
El decreto que regula todo esto es el 35985-MOPT, emitido en abril de 2010. Aquí se establece que estos taxis son los únicos autorizados para ofrecer el servicio de taxi dentro del perímetro del aeropuerto y también que el color oficial de estos taxis es el naranja (aunque este ya era el tono característico de las unidades desde hacía años).
Datos generales de los taxis del aeropuerto:
Pese a que hay 107 taxis naranja dando servicio, según el decreto de 2010 tenían que ser 100 divididos en estos tipos:
--60 vehículos sedanes
--30 microbuses
--10 vehículos especiales para personas con discapacidad
Las concesiones están en manos de personas particulares y no de empresas ni cooperativas.
Cuando un dueño de vehículo para taxi de aeropuerto gana una concesión en un concurso o licitación, esa persona puede trabajar en solitario o puede agruparse si lo desea.
En la actualidad hay cinco entidades que agrupan a los concesionarios de taxis anaranjados:
--Coopetranstura (Cooperativa Transportes Turísticos Aeroportuarios R. L.)
--Taxis Unidos (la más longeva en dar el servicio; desde 1975)
El Consejo de Transporte Público (CTP), del Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT), es quien decide cuándo abrir licitaciones según la necesidad. La última que se hizo fue en 2011.
Ojo: Aunque el CTP contabiliza 107 taxis anaranjados oficiales, en realidad operan unos 130, pues algunas personas que no participaron en uno de los concursos anteriores dan el servicio con sus taxis color naranja pero se encuentran en condición legal “precaria”, según el director del CTP, Manuel Vega. En estos momentos hay un proceso abierto para “sacarlos paulatinamente”, según explica el jerarca.
¿Por qué tienen una tarifa tan elevada?
La respuesta oficial es técnica y la respuesta resumida es esta: porque se trata de un servicio único, diferente al que ofrecen los taxis rojos de ciudad. Veamos.
Quien regula la tarifa de los taxis anaranjados es la misma que regula la de los taxis rojos: la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (Aresep). Desde luego, Aresep no considera opciones de transporte más baratas como Uber a la hora de establecer las tarifas, pues estas plataformas digitales todavía no son legales en Costa Rica.
Esto nos respondió oficialmente el Director de Transporte de Aresep, Mauricio González para explicar las tarifas de los taxis naranja:
La tarifa funciona exactamente igual a la tarifa de los taxis rojos.
Existen tarifas por banderazo, distancia, espera y demora.
Las cuatro tarifas varían dependiendo del tipo de vehículo (sedán, microbús).
Para efectos de ejemplo, en el caso de los sedanes del aeropuerto, la tarifa banderazo vigente es de ¢955 y la tarifa por distancia es de ¢815.
En cambio, la tarifa banderazo vigente de los taxis rojos sedanes es de ¢645 y la tarifa por distancia es de ¢615.
Las diferencias se deben a que el modelo tarifario toma en cuenta las particularidades de ambos servicios por aparte, dado que tienen condiciones de prestación distintas y por ende presentan niveles de costos y de demanda diferentes.
Los taxis del aeropuerto tienen su base de operación únicamente en el aeropuerto. Solo pueden recoger a personas en el aeropuerto para llevarlas a sus destinos o recogerlas en un punto determinado para llevarlas al aeropuerto. No pueden montar a pasajeros que los detienen en la calle.
Así, explica González, se toma en consideración que los costos de un servicio de taxi aeropuerto incluyen tanto el desplazamiento que se cobra del aeropuerto al destino, como el desplazamiento de regreso al aeropuerto, o viceversa.
Esta particularidad provoca un incremento de los costos de prestación, en este caso en la variable de “kilómetros improductivos”.
Estas son las tarifas en 2019 para los sedanes y microbuses del aeropuerto:
Sedán:
Banderazo - ¢955
Distancia - ¢815
Espera - ¢3.805
Demora - ¢8.080
Microbús:
Banderazo - ¢955
Distancia - ¢930
Espera - ¢4.380
Demora - ¢9.335
En el decreto 35985-MOPT se establece que estos taxis deben contar con un taxímetro visible para el pasajero y deben cobrar únicamente lo que marca el taxímetro una vez llegan a su destino.
Un dirigente de los taxis del aeropuerto, que nos pidió ocultar su identidad para esta publicación, justifica así la tarifa:
“Somos una base de operación con una tarifa regulada por Aresep. Se han hecho todos los cálculos para poder tomar esa tarifa del aeropuerto. Ya han hecho estudio de mercado para saber si realmente esa tarifa está acorde con el presupuesto o no”.
“Yo los dejo que critiquen porque generalmente las personas no analizan cuando dicen las cosas. Ellos creen que el taxi naranja puede andar juntando en todo lado. Eso no es así. Nosotros tenemos una modalidad totalmente distinta”.
Algunos problemas e irregularidades
Hace unos años, agrupaciones de taxis anaranjados se rehusaban a usar taxímetros o “Marías” en sus unidades. Para determinar los cobros usaban tablas con distancias y precios predeterminados. Esto cambió con el decreto del MOPT.
También se sabe de taxistas que cobraban en dólares, cuando deben cobrar en la moneda de transacción nacional: el colón. Sí pueden aceptar dólares pero haciendo el cálculo de conversión de la moneda según la fecha.
En el pasado también ha habido concesionarios que presentaron supuestos títulos falsos para demostrar que hablaban inglés, y hubo problemas por ello. Pero también hay concesionarios que saben inglés, francés, ruso y hasta más idiomas, según explicó el jerarca del CTP.
Un problema más reciente es la acumulación de personas que ofrecen servicios de transporte en la única salida de viajeros a la carretera del aeropuerto.
Allí, la primera imagen de Costa Rica que reciben los viajantes es la de un tumulto de personas vociferando para que elijan su respectivo servicio de transporte, cuando el único servicio oficial son los taxis anaranjados.
Manuel Vega, director del CTP, lo describe como un “mercado persa”.
“Cuando está saliendo eso es un mercado persa. Tenemos operadores de hoteles, operadores de turismo y servicios especiales, tenemos los taxistas que tienen un orden definido para ir saliendo, y el pirataje es endemoniado. El aeropuerto necesita seguridad. Hay gente que se lleva a los turistas afuera del aeropuerto para que pidan un taxi pirata”, lamenta Vega.
“Los ticos todo lo consideramos público”, subraya el director del CTP. “Y por ende un lugar donde podemos hacer un festín. Hay que poner orden. En ningún aeropuerto existe ese desorden que tenemos nosotros a la salida”.
Como respuesta a una reciente manifestación de taxistas oficiales del aeropuerto, las autoridades del Juan Santamaría prometieron que buscarán evitar la ‘cacería’ de turistas por parte de taxis ilegales.
Volviendo a las críticas que hacen usuarios en redes sociales por las altas tarifas de los taxis del aeropuerto (en Google Reviews uno de estos servicios tiene calificación de 2 estrellas de 5 posibles y en Facebook tiene 1,5 estrellas de 5), es lógico pensar que los viajantes busquen opciones más cómodas para sus bolsillos. Más si están acostumbrados a servicios como Uber que también funcionan en sus países.
También hablamos de esto con Manuel Vega, del CTP.
P: ¿No es contraproducente que el servicio oficial de taxis del aeropuerto esté marcado internacionalmente por ser caro?
R: ¿Nos tenemos que mover nada más por precio?
P: Al parecer sí, viendo el comportamiento de los usuarios.
R: No todo tiene que ser marcado por un precio, porque si nos movemos a un punto donde la calidad del servicio se nos agota, tampoco se puede. Tampoco. Debe haber una ponderación, un equilibrio.