Múltiples protestas y jornadas de violencia han estallado en las principales ciudades de Bolivia tras conocerse los resultados de las elecciones presidenciales de Bolivia 2019, que tuvieron lugar el pasado domingo 20 de octubre. Lo que parecia enrumbarse hacia una segunda ronda electoral donde Evo Morales tendría las de perder, se convirtió en una victoria en primera ronda del líder indígena exsindicalista.
Versión exprés
--Las elecciones fueron el domingo 20 de octubre. En la noche, el conteo de votos parecía garantizar una segunda vuelta electoral entre Evo Morales (actual presidente desde el 2006) y Carlos Mesa.
--A último momento, la autoridad electoral revirtió la tendencia y tras 20 horas de silencio, publicó datos que ponían como vencedor virtual a Evo Morales en primera ronda. La OEA calificó este giro de “inexplicable” y miles se lanzaron a las calles alegando “fraude electoral”.
--El martes, el órgano electoral regresó sobre sus pasos y el conteo de votos siguió hasta el jueves por la tarde. Todo este tiempo sumió al país en una zozobra y en manifestaciones opositoras que temían un fraude, en manifestaciones de militantes oficialistas que sí desean ver a Evo en el poder por cuarto período presidencial, y fuerte represión estatal contra los primeros.
--La tarde de este jueves 24 de octubre, el Poder Electoral oficializó la victoria en primera ronda de Evo Morales. Se temen más manifestaciones y jornadas de violencia a causa de lo que opositores y algunos actores de la comunidad internacional valoran como un “fraude electoral.”
Versión de análisis (con información de periodistas de Bolivia)
Los hechos se desarrollaron así:
--Las elecciones presidenciales se llevaron a cabo el pasado domingo 20 de octubre con controversia: el Órgano Electoral Plurinacional (OEP) tenía altas dosis de descrédito por parte de los bolivianos, tras aceptar que el actual presidente, Evo Morales, participara del proceso electoral nuevamente como candidato.
--En 2016, el OEP realizó un referendo para que los bolivianos decidieran si le permitían al tres veces presidente Evo Morales lanzarse en busca de un cuarto período consecutivo. La mayoría del pueblo boliviano dijo “no” (51,3% de los votos). Pero Morales desconoció el referendo y aún así el OEP aceptó que el mandatario buscara otra vez la presidencia en el 2019. Esto socavó la confianza de los votantes con el órgano electoral. En Bolivia, de hecho, la oposición y muchos ciudadanos consideran al OEP como una entidad dependiente del Poder Ejecutivo, y no como un cuarto poder independiente.
--Con este escenario, las elecciones presidenciales de este domingo contaron con observadores internacionales, entre ellos de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Los candidatos favoritos eran Evo Morales, del partido Movimiento Al Socialismo (MAS) y Carlos Mesa, del partido Comunidad Ciudadana.
Mesa es historiador y periodista. No es fácil encasillarlo en un lado del espectro político. Fue vicepresidente de Bolivia y asumió la presidencia entre el 2003 y el 2005, cuando el mandatario Gonzalo Sánchez de Lozada huyó del país tras la Masacre de Octubre). Cuando Mesa se perfiló como el principal opositor de Evo Morales, muchos votantes se volcaron a apoyarlo más como un voto contra Morales que como un voto en apoyo a Mesa.
--Las reglas dispuestas por el OEP para ganar la presidencia en en 2019 eran así:
Se puede ganar la primera ronda por mayoría simple: 50% + 1 de los sufragios
Se puede ganar la primera ronda sin llegar a ese tope si el candidato con mayor votación consigue 40%, pero sacándole más de 10 puntos porcentuales de diferencia al segundo lugar.
Cualquier otro resultado enviaría a los dos candidatos con mayor número de votos a una segunda vuelta.
Y aquí comienza la confusión.
--El OEP habilitó dos sistemas de conteo de votos: uno oficial esperando cada acta de los diversos departamentos y del extranjero, donde se cuenta acta por acta. Y uno rápido llamado TREP (Transmisión de Resultados Electorales Preliminares).
Tras la votación del domingo, el TREP quedó congelado en 84% de las papeletas verificadas, con datos que preveían una segunda vuelta inminente entre Evo Morales y Carlos Mesa. Pasó casi un día sin una actualización, hasta que este lunes se reveló que con 90% de papeletas verificadas, Evo Morales le sacaría una diferencia igual o mayor a 10 puntos porcentuales a Mesa, lo que lo catapultaría a su cuarto período presidencial en primera ronda.
“De un plumazo cambiaron las cifras y Evo tomó la delantera, dejando de lado la posibilidad de segunda vuelta”, describe uno de los periodistas que entrevistamos.
Esto ocasionó protestas en distintas ciudades. Y provocó la convocatoria de un paro nacional indefinido por parte del Comité Cívico de Santa Cruz, la ciudad-motor económico del país. Este Comité tiene mucha legitimidad entre la población cruceña, al punto que miles compraron víveres y agotaron productos en supermercados este martes para prepararse para el paro.
En la capital política, La Paz, también hubo manifestaciones y avisos de paro. En su mayoría, quienes salen a las calles a protestar son jóvenes, pero también se encuentran con contingentes del oficialismo, compuestos por militantes del MAS y también por fuerzas de choque de Evo Morales.
--Martes 22 de octubre: En horas de la tarde, la presidenta del OEP, María Eugenia Choque, salió llorando en una conferencia de prensa y exclamó: “Cómo es posible que nos digan que hay fraude”. Pero también reveló el último conteo del TREP (el rápido): 95.1% de papeletas verificadas con este resultado:
Evo Morales: 45.85%
Carlos Mesa: 37.54%
Diferencia: 8.31%
En ese momento y en esa cuenta, nuevamente, había segunda vuelta electoral, pero todo podía cambiar (como lo hizo entre la noche del domingo y el lunes).
Por su parte, el conteo oficial acta por acta, continuaba siendo de aproximadamente 95.7% de las actas, y arrojaba estos resultados:
Evo Morales: 46.4%
Carlos Mesa: 37.07%
Diferencia: 9.33%
Aquí Morales estaba más cercano a lograr la diferencia de 10% para ser presidente en primera vuelta. Todo era muy confuso y lo fue hasta este jueves.
De hecho, Evo Morales dijo desde el domingo que no haría falta una segunda ronda de votos. Esta delcaración encarnizó las protestas contra el sistema electoral y el presunto fraude.
Por si esto fuera poco, el mismo martes por la noche el vicepresidente del OEP, Antonio Costas, renunció de su cargo por diferencias en la paralización del cómputo del tribunal electoral.
La confusión era muy grande y hubo choques entre opositores y fuerzas represoras en las calles de La Paz, Santa Cruz, Sucre y otras ciudades. El país vivió horas de suspenso en las que cualquier desenlace era esperable.
--Miércoles 23 de octubre: Jornadas de manifestaciones y represión violenta ocurrieron en varias ciudades y hubo heridos. El conteo de votos continuó pero el sitio web de la autoridad electoral colapsa por muchas horas de la tarde-noche.
#EleccionesBolivia2019 | Después de 3 días de fuertes protestas por presunto "fraude electoral" a favor de #EvoMorales, así está el sitio web del Órgano Electoral Plurinacional de Bolivia🇧🇴 (@TSEBolivia). El país está en zozobra, hay paro indefinido y un gigante signo de pregunta pic.twitter.com/hD5eMqOCLr
— Fabrice Le Lous (@fabricelelous) October 23, 2019
--Jueves 24 de octubre: el Órgano Electoral Plurinacional oficializa el conteo total de votos y da la victoria en primera ronda a Evo Morales. El resultado final, definitivo acta por acta es el siguiente:
Evo Morales: 47.07%
Carlos Mesa: 36.52%
Diferencia: 10.55%
El partido de Mesa, Comunidad Ciudadana, indentificó 109.277 votos cuestionados y ve cinco variables de fraude.
Como es de esperarse, se temen más protestas contra el Poder Electoral y contra Evo Morales Ayma, quien llegará a 2025 como presidente de Bolivia acumulando 20 años en el puesto.