Es posible que usted haya visto una historia en las noticias o en internet que le hizo pensar: “¡desearía haber tenido esa idea!”; también es probable que esa idea le haya dado una fortuna a la persona que la tuvo.
Desearía haber sido usted, cosechando las recompensas de ese momento de inspiración en el que se le ocurrió la idea que cambiaría su vida.
La verdad es que si puede ser esa persona. Solo tiene que saber cómo abrirse a la inspiración y luego descubrir cómo reconocer esa inspiración cuando se presente.
Lo primero que debe hacer es deshacerse de sus nociones preconcebidas. Es mucho más fácil decirlo que hacerlo, pero es posible. Debe comenzar identificando sus ideas preconcebidas y determinando cuáles de ellas podrían evitar que se abra la puerta a una idea cuando se presente.
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Luego, deshágase de esa creencia por completo. De esta manera, no tendrá nada bloqueando el camino si se presenta una buena idea.
Las personas por lo general tienden a juzgar un libro por su portada, lo mismo ocurre con las ideas de negocios. A muchas personas se les han presentado oportunidades de negocios pero por sus creencias y prejuicios tienden a desechar la idea sin siquiera haber meditado sobre ella.
A continuación, deberá comenzar a prestar más atención a su entorno. Es muy fácil acostumbrarse tanto a la rutina habitual que no se da cuenta de las cosas que le rodean. Pero esas cosas serán lo que inspire sus ideas de negocio.
En su vida diaria, busque cosas relacionadas con los negocios. En particular, busque necesidades que deban llenarse, necesidades que no se están cumpliendo. Aquí es donde encontrará las mejores ideas de negocios.
Debe determinar exactamente cómo funcionará la idea y qué tipo de dificultades puede esperar encontrar. A veces, una idea que se ve muy bien en la superficie resultará terrible, y a veces sucede lo contrario.
Es muy importante rodearse de personas que tengan experiencia en negocios y que estén dispuestos a ayudarle, puede mostrarle la idea a estas personas y con su experiencia y conocimiento podrá tomar decisiones mucho más informadas.
Lo más importante que puede hacer es pensar continuamente en las cosas desde una perspectiva comercial hasta que se convierta en un hábito tan grande que no pueda apagarlo.
A mí me ocurre que todo lo relaciono con los negocios, llega un punto en el que usted todo lo comienza a ver como una inversión. Es entonces cuando comenzará a proponer ideas increíbles, una de las cuales podría catapultarlo al éxito.
Pero la idea tiene que venir primero y las ideas solo se le presentan a los cerebros que piensan, ¡así que ponga su cerebro a pensar!