EscucharAriel Abarca y Andrés Boza descubren el mundo al aprovechar al máximo un programa de viajero frecuente, alimentado por las millas obtenidas al usar una tarjetas de crédito o débito.
Ambos suelen exprimir las opciones disponibles para obtener boletos aéreos, con tal de ahorrar dinero y abrir la posibilidad de llegar a nuevos destinos.
En Costa Rica, diversos bancos ofrecen programas de acumulación de millas asociados a líneas aéreas; no obstante, es posible que un sector de los viajeros lo desconozca o no sepa cómo sacarle réditos.
Andrés Boza los recomienda para acumular millas a diario.
“Básicamente, este tipo de tarjetas permiten hacer un ahorro diario de millas. Si se combina ese ahorro con el de dinero en efectivo, los exploradores podrán hacer realidad su sueño de viajar a conocer el mundo en poco tiempo”, opina Boza, quien es travel hacker y moderador del grupo de Facebook Soy Explorador Tico.
Por su parte, Ariel Abarca suele ser muy meticuloso para encontrar las mejores opciones para viajar. Asegura que las millas que gana al usar sus tarjetas las invierte exclusivamente en tiquetes aéreos, y no en otros beneficios como hoteles.
”Entre más larga la distancia, mejor. Por 70.000 millas se puede obtener un boleto ida y vuelta a Europa con equipaje, algo que de contado tiene un valor promedio de $1.000. Mientras que otras redenciones, por ejemplo hoteles, usualmente cuestan 25.000 millas la noche, la misma con un valor menor a $200 si pagara de contado. Es decir, por tres noches de hospedaje en un hotel corriente, pierdo la oportunidad de volar a Europa“, ejemplificó.
Para Boza, el viajero debe escoger una tarjeta y programa que se amolde a sus necesidades y gustos, por lo que es importante considerar los países que le gustaría visitar. Si alguien desea explorar Europa, es mejor que opte por alguna línea aérea que vaya a ese continente y no por una que solo vuele en Latinoamérica.
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Sobre cuál programa de viajero frecuente utilizar, Abarca aconseja escoger alguno que tenga la mayor cantidad de vuelos saliendo del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, pues así se incrementa la posibilidad de encontrar asientos e itinerarios convenientes (el más rápido o directo posible).
”Recomiendo en el tiempo libre hacer reservaciones falsas para familiarizarse con el sistema, aunque sea una vez al mes. No importa que no tenga la intención de viajar todavía”, sugiere Abarca para que el pasajero conozca lo que el portal de redenciones le ofrece.
“En enero puede hace una reservación falsa San José - Miami para volar en junio. En febrero puede probar San José - Madrid para volar en julio. En marzo prueba San José - Beijing para viajar en abril. Así se va acostumbrando a la oferta del programa, y cuando esté seguro de viajar, ya tiene una idea de cómo funciona el sistema y podrá tomar las medidas adecuadas”, resaltó Abarca.
Entre sus estrategias están pagar todas sus compras con la tarjeta de crédito para ganar más millas, pero con la precaución de ser ordenado con las finanzas. Además, busca el plan que le dé más puntos o millas por dólar y que esté equiparado a un programa de viajero frecuente.
”Siempre aprovecho las ofertas de conversión de puntos que dan bonos de millas adicionales o descuentos en boletos de ciertas rutas o aerolíneas”, apuntó Abarca.
Entre tanto, Boza resalta algunas precauciones que deben tener los viajeros.
“Al igual que con todo producto financiero, las personas deben tener presentes las tasas de interés de esas tarjetas de crédito para el financiamiento de sus gastos en general, así como de sus boletos aéreos y el viaje, ya que muchas exigen que esos costos se adquieran para acceder a beneficios exclusivos, como descuentos o para obtener cobertura de seguro viajero o de alquiler de vehículo gratuitos”, indicó Boza.
Sobre el principal error en que pueden incurrir las personas, Abarca considera que es no leer el folleto informativo o no ingresar al portal del banco o de la marca de tarjeta (Visa, MasterCard o American Express), donde aparecen todos los beneficios del plástico.
“Hay gente que paga seguros de viaje o de renta de autos sin saber que su tarjeta ya los incluye o pagan precios exorbitantes en restaurantes de los aeropuertos, y no saben que tienen acceso al salón ejecutivo con alimentos y bebidas ilimitadas”, subrayó.
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Andrés Boza opina igual y revela que al leer con detenimiento las condiciones, puede obtener buenas sorpresas.
“El secreto es revisar con cuidado la lista de beneficios que le ofrece el banco y estarlo haciendo continuamente, por lo menos una vez por trimestre, de modo que se beneficien de ellos. Yo por ejemplo, obtuve una cortesía de un año de servicio en mi membresía del servicio de televisión paga Disney+ al seguir las instrucciones de una de mis tarjetas de crédito viajeras”.
”Igualmente deben estar pendiente de cuáles son los requisitos de las distintas categorías de tarjetas de crédito, de modo que pueda solicitar ascensos de categoría al menos una vez al año. Yo hice eso con mi primera tarjeta de crédito viajero y en un plazo de cinco años pude ascender de tarjeta dorada, a tarjeta plateada y finalmente, a tarjeta negra”, reveló Boza.
