El Régimen Voluntario de Pensión Complementaria es, de forma sencilla, un fondo o ahorro que una persona puede realizar con el objetivo de complementar la futura pensión que recibirá o crear sus propios recursos para asegurarse una pensión independiente.
Este tipo de pensión se genera a partir de un ahorro mensual por parte del usuario, cuyo monto puede determinar o cambiar de acuerdo con sus necesidades. Además, este fondo se puede exonerar del impuesto sobre la renta y esas cuentas no pueden ser embargadas o cedidas.
Con el objetivo de explicar cómo funciona una pensión complementaria de carácter voluntario, La Nación conversó con Marco Vargas Aguilar, gerente de Producto y Comercialización de BN Vital, operadora de pensiones del Banco Nacional de Costa Rica.
“La pensión complementaria voluntaria es un ahorro mío, no es para subsidiar pensiones de otras personas, sino que me pertenece a mí”, expresó Vargas.
De acuerdo con el gerente, “si a usted la pensión del IVM le cubre un 70% de su salario habitual, la pensión complementaria voluntaria le puede venir a cubrir ese 30% faltante para no perder capacidades de consumo”, explicó.
¿Por qué es importante?
De acuerdo con el informe Valuación Actuarial del Seguro de Invalidez, Vejez y Muerte, realizado en julio del 2019, el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) comenzaría a enfrentar los primeros problemas de insolvencia a partir de 2021.
El estudio señala que la cotización hecha por 1,7 millones de trabajadores, 88.000 patronos y el Estado sería insuficiente para pagar las pensiones de 281.000 personas, por lo que comenzarían a usarse los intereses de la reserva. Para el 2030, la reserva comenzaría a reducirse y, en el 2037, se agotaría.
Debido a este panorama poco alentador, la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) decidió reformar el régimen de IVM, mediante la eliminación de la pensión anticipada para los hombres.
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Según las autoridades, con la reforma avalada, la sostenibilidad del fondo del IVM se garantiza al menos hasta el 2050, en vez del 2037, año señalado por el informe citado anteriormente.
No obstante, la situación provoca un ambiente de inseguridad y desconfianza, principalmente en aquellas personas que se encuentran en edades productivas tempranas y, para 2050, no estarán siquiera cerca de acogerse a su pensión. Por esto, una pensión complementaria puede ser una buena inversión.
Determine su expectativa de pensión
El primer paso que debe tomar una persona cuando quiere desarrollar un plan de pensión complementaria es preguntarse cuál es su expectativa de pensión. De esta forma, puede tomar las decisiones de ahorro necesarias para procurar esos ingresos.
“De esta forma, la pensión pasa de ser algo que me va a tocar y no puedo hacer nada sobre ello, a ser algo que yo voy a construir, con una meta, con un objetivo, con acciones concretas”, subrayó Vargas.
En el sitio web de las diferentes operadoras de pensiones (BN Vital, BCR Pensiones, BAC Pensiones, Popular Pensiones, Vida Plena y CCSS OPC) usted podrá encontrar correo electrónico, WhatsApp, teléfono y algunos otros canales de contacto para solicitar asesoría profesional.
¿Qué necesito para optar por una pensión complementaria?
Cualquier persona mayor de 15 años puede tener una pensión complementaria voluntaria.
No es un condicionante si el usuario es asalariado o trabajador independiente.
Solamente debe llenar y firmar un contrato con la operadora de pensiones que considere más adecuada para sus intereses. Sin embargo, debe tomar en cuenta que el monto mínimo de ahorro es de ¢5.000 mensuales.
En el caso de BN Vital, la firma del contrato se da de forma presencial, pues en este proceso el usuario puede determinar los beneficiarios de su ahorro, gestión que solamente es legal de forma presencial.
No obstante, si el usuario no desea establecer los beneficiarios al momento de abrir su plan de pensión, el proceso sí se puede hacer mediante correo electrónico. Solamente deberá imprimir el documento, firmarlo, escanearlo y volver a enviarlo a la operadora.
Posteriormente, cuando el cliente quiera establecer los beneficiarios de su plan, funcionarios del Banco Nacional le visitarán en su hogar para realizar el proceso, aclaró Vargas.
Además, el interesado también puede definir el monto o porcentaje que desea ahorrar y el método de ahorro (desde deducciones a la planilla salarial, hasta pagos automáticos desde alguna cuenta bancaria específica).
Es importante recalcar que, para tener un plan de pensión con BN Vital, no es necesario tener una cuenta bancaria con el Banco Nacional, si bien le permitirá realizar una gestión y consulta más sencilla de su pensión complementaria.
¿Cuánto me cobran por tener un plan de pensión complementaria voluntaria?
Vargas explica que cuando una persona va a analizar la comisión que se le cobra tiene que tomar en cuenta la base sobre la cual se da este rebajo.
Es decir, le pueden cobrar sobre los aportes, por medio de una comisión respecto a su aporte mensual; o sobre el saldo administrado, que sería una comisión del saldo del ahorro tomando en cuenta las ganancias por intereses que han engrosado el ahorro.
“La comisión que cobran todas las operadoras de pensiones, por normativa, es sobre la base del saldo administrado, pero en el plan voluntario cada operadora puede escoger”, explica Vargas.
BN Vital no escogió ninguna de las dos opciones mencionadas, sino que optó por cobrar una comisión por rendimientos, esto significa que, si los rendimientos de intereses que el ahorro obtiene son altos, la comisión de la operadora es mayor, pero si los intereses son bajos, la comisión también lo será.
Estos rendimientos se dan porque, cuando usted tiene un fondo de pensiones, su dinero acumulado es la suma de sus aportes mensuales, más los intereses o rentabilidad que ese dinero generó. En este caso, BN Vital cobra una comisión de un 10% sobre el total de los rendimientos.
Como conclusión, Vargas señala que el ahorro no es rígido, sino que se puede modificar, suspender o reducir.
Por ejemplo, si la persona usuaria ahorra veinte mil colones al mes, pero está atravesando una situación económica complicada, puede detener su ahorro o rebajarlo al monto mínimo, cinco mil colones, sin ningún cargo o penalización.