Encontré una opción para comer rico y descansar a muy poco tiempo y distancia de San José, donde las noches son frescas y silenciosas, pero durante el día es bastante cálido.
No es una adivinanza ni un sitio de difícil acceso. Todo lo contrario: se trata de una propiedad en Paraíso de Cartago por donde ingresan todo tipo de vehículos.
En este segundo párrafo le resumo que la picaña término medio que probé así como la crema de tomate dentro de un pan hogaza estaban fabulosas.
Un tercer párrafo para no extender el anterior y para cerrar con que la pizza de pollo barbacoa con aguacate y aros de cebolla resultó diferente y exquisita.
Por tratarse de cortes de carne de muy buena calidad, los precios promedio de este tipo de proteína —con dos buenos acompañamientos— rondan los 10 mil colones.
Las pizzas llegan a la mesa por un aproximado de 8 mil colones y traen ocho porciones bastante generosas. No se pierda el siguiente video.
Video:
Paseo.
Lo primero que pensé al saber de esta opción gastronómica llamada Orocay Bistró es que resulta idónea para un magnífico paseo de fin de semana porque también es hotel y cabinas.
Por ejemplo, sale uno del trabajo un viernes por la tarde y se enrumba hacia tierras brumosas.
Llega en la noche, justo para la cena, y descansa en los jacuzzi o en los “fire pits” antes de ir a dormir a la habitación.
Los “fire pits” son bancas tipo medialuna con una fogata en el centro (como en el video anterior).
Allí, algunas personas acostumbran pasar el rato en compañía de un chocolate caliente, un vino u otras bebidas.
Al día siguiente —sábado— aprovecha el desayuno que incluye la noche de hospedaje y se da una vuelta alrededor del lago de Cachí, va al Parque Nacional Tapantí o a alguna piscina de aguas termales.
Para las personas más deportistas, está la opción de llevar sus bicicletas de montaña y darle rienda suelta a los pedales.
Si la bici es ajena a sus pasatiempos, puede irse de caminata y corrida en las cercanías o conducir unos pocos kilómetros hacia la represa y buscar la Escalada Cachí para practicar ‘climbing’ (escalada) y ‘canopy’ (tirolesa).
Si maximiza el tiempo, puede devolverse al hotel para aprovechar la ducha y la opción de almuerzo.
¿Cómo llegar?
Lo más fácil es poner en Waze las palabras “Orocay Bistró” y dejarse llevar por la facilidad digital.
Si se queda sin batería, aquí le cuento cómo llegar con esta dirección analógica y a la tica, para que luego no se pierda:
Imagine que viaja en carro del parque de Paraíso hacia el sureste, buscando carretera a Orosi.
En la estación de Bomberos, dobla a la izquierda —hacia el este— y avanza sobre la “carretera vieja” a Ujarrás (la que llevaba a la catarata “Salto de la novia”) hasta que vea a la izquierda de ella el salón de eventos Picacho. ¡Ahí no es!
Pero, justo en ese punto, destaca a la derecha una callecilla de lastre que, al descenderla unos 500 metros, da con el restaurante y hotel que me recomendó mi hermano, Marco.
José Pablo Alonso y José María Araya están a cargo de las operaciones y la cocina, respectivamente.
De continuar descendiendo por el lastre, el camino lleva a las Ruinas de Ujarrás.
Esta opción gastronómica y de alojamiento cuenta con dos opciones de habitación: (1) la cabaña rústica que tiene un costo de ¢44.500 y (2) la ordinaria con vista al cerro de la Muerte con un valor de ¢49.500.
En ambas opciones están incluidos los desayunos (típico o continental).
Historia.
Me gusta la etimología y siempre me pregunto el porqué de los nombres de las palabras. Más aún con este tan cercano. Para ello, le consulté acerca de ‘Orocay’ a mi amigo Víctor Julián Granados, quien es estudiante de Historia y me ayudó a dar con valiosos documentos.
Resulta que la historiadora Eugenia Ibarra Rojas menciona Orocay como un pueblo que conformaba el cacicazgo del Guarco (actualmente, el cantón se llama El Guarco). Esto lo detalla en su publicación “La desestructuración del cacicazgo en el siglo XVI y su relación con el proceso de conquista: una perspectiva desde su organización social”.
Ella, a la hora de hacer esta mención, cita la “Colección de documentos para la Historia de Costa Rica” de su colega León Fernández Bonilla.
Orocay, Oroce u Oroci aparecen como sinónimos al igual que casos como Coquerrique, Cucurrique y Tucurrique.
Entonces, ahora sí, una adivinanza: ¿a cuál se refiere Uxarrace, Uxarraez o Uxarrací? ¿O Turriarva? Sin pistas, ya que son bastante inteligibles.
Nueve fotos más:
Fin.
En Instagram acostumbro subir fotos y videos relacionados con comida, árboles, animales, deportes y naturaleza. Algunas de ellas terminan convirtiéndose en publicaciones de este blog.
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