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Ser un buen anfitrión es cuidar cada detalle, y en época navideña eso significa transformar su hogar en un espacio cálido y encantador. A medida que se acercan las fiestas, es momento de revisar lo que ya tiene, descubrir lo que puede renovar y añadir esos toques especiales que harán que cada rincón brille.
Activar el “modo suegra”, la clave para ser el mejor anfitrión esta Navidad
Es hora de activar el “modo suegra”. Sí, ese instinto casi sobrehumano que poseen algunas suegras para detectar cada pequeño detalle (o falla) en casa.
Según Andrea Hernández Vindas, asesora de imagen y etiqueta, es esa misma atención al detalle la que debemos emular para convertirnos en anfitrionas excepcionales y asegurar que nuestros invitados se sientan como en casa, sin importar lo exigentes que puedan ser.
“Ser una buena anfitriona no se trata solo de tener la casa impecable; se trata de pensar más allá de lo esperado, de anticiparse a cada necesidad y de lograr que los invitados se sientan acogidos y cómodos desde el primer momento”.
— Andrea Hernández Vindas.
De acuerdo con la experta, una anfitriona ideal posee ciertas cualidades que no pueden faltar. La calidez y la hospitalidad para hacer sentir a los demás como en su propia casa, la flexibilidad y creatividad para resolver imprevistos, la confianza y sociabilidad para crear un ambiente agradable, y la empatía para leer el estado de ánimo de sus invitados, respondiendo a sus necesidades sin hacerlos sentir observados.
Atmósfera excepcional
Ahora bien, para garantizar que nuestros invitados experimenten una noche inolvidable, debemos considerar más que solo la decoración. “Siempre sugiero observar el espacio desde la perspectiva del invitado, anticipando qué necesita ver, oler o sentir para que se sienta cómodo”.
En cuanto a los espacios que quizás no usaremos, mejor tenerlos presentables porque, como toda buena suegra, nunca sabemos qué habitación van a inspeccionar.
Esta guía le trae algunas recomendaciones imprescindibles de Cemaco para que reciba a sus invitados con detalles únicos y logre una atmósfera festiva inolvidable.
Detalles como mantener el vino a la temperatura correcta y servir una deliciosa tabla de quesos, serán muy apreciados por los invitados. Fotografías: José Cordero
Un dispensador de temporada le agrega color al baño, mientras que el paño en colores neutros con un diseño dorado, le aporta elegancia. Fotografías: José Cordero.
“La etiqueta y la consideración son los pilares de una buena anfitriona. No hace falta lujo desmedido para que los invitados se sientan bien; a veces, en los hogares más humildes es donde se vive la hospitalidad más sincera. La amabilidad y la atención valen mucho más que la opulencia, como si estuviéramos en casa de la abuelita”, finaliza Hernández.
Encuentre estos y muchos otros detalles de temporada en Cemaco. ¡Es hora de poner su hogar a punto para las celebraciones!
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