EscucharEl AC Milan y el Tottenham, que se enfrentan este martes en la ida de octavos de final de la Liga de Campeones, comparten una gran dependencia de sus delanteros centros: el francés Olivier Giroud y el inglés Harry Kane, cara a cara dos meses después de su duelo épico en el Mundial-2022.
En Catar en el partido Francia-Inglaterra, el duelo entre los dos cazagoles cayó del lado del galo, goleador decisivo durante aquella confrontación de cuartos de final equilibrada en el que el inglés falló un penal en los minutos finales, después de haber anotado otro anteriormente (2-1).
El Mundial tampoco terminó mucho mejor para el máximo goleador de los Bleus (53 tantos). No volvió a ver puerta y en la final ante Argentina fue reemplazado antes incluso del descanso, con una Francia a la deriva.
Con la moral por los suelos en el regreso, 'Oli' tardó varias semanas en recuperar su mordiente. Al igual que un AC Milan insípido que encadenó siete partidos sin victoria entre todas las competiciones, y con estrepitosas derrotas entre medias contra el Inter de Milán (3-0) en Supercopa de Italia o la Lazio (4-0) y el Sassuolo (5-2) en la Serie A.
La espiral negativa llegó a su fin el viernes contra el Torino (1-0) gracias, cómo no, a un gol de Giroud, su séptimo en la liga italiana.
Los tifosi pudieron volver a entonar el cántico 'Giroud si è girato' ('Giroud ha vuelto') creado la pasada temporada después de un doblete salvador del francés contra el Inter de Milán (2-1).
El entrenador Stefano Pioli pudo recordar hasta qué punto su goleador de 36 años sigue siendo indispensable, titular inamovible ante la ausencia prolongada de Zlatan Ibrahimovic: "Oli es un jugador muy importante, técnicamente y mentalmente, es un líder de este equipo".
Nadie duda de que Pioli cuenta con él mientras se mantiene la negociación para una eventual prolongación del contrato del francés, que quedaría libre en junio.
Pero las dos partes parecen predispuestas al acuerdo. El jugador aseguran sentirse "bien" en Milán. "He logrado ganar el corazón de los tifosi con goles importantes. Me siento como en casa", afirmó en enero para Canal+, descartando por el momento "destinos más exóticos" como la MLS de norteamérica.
Llegado sin laureles de Catar, Harry Kane mostró su fortaleza de carácter para relanzarse al asalto de la Premier League después del penal errado ante los 'Bleus'.
Y el Tottenham depende en gran medida de sus goles: el delantero centro de 29 años carga sobre sus hombros a los Spurs desde el inicio de temporada, habida cuenta por la baja forma persistente de Son Heung-min.
A la sombra de un Erling Haaland inaccesible, Kane ya suma 17 goles en 23 fechas, tantos como en la toda la pasada temporada.
Además se convirtió en el máximo goleador de la historia del Tottenham con 267 goles entre todas las competiciones, en la victoria contra el Manchester City (1-0), el 5 de febrero.
Ese éxito se vio oscurecido por la dura derrota (4-1) en Leicester, el pasado fin de semana, que puso de manifiesto la irregularidad de este equipo y su inmensa dependencia de su estrella.
Con contrato hasta 2024, Kane no ofrece signos de desgaste y parece tener aún tres o cuatro temporadas por delante al más alto nivel.
Pero su palmarés sigue desesperadamente virgen, y el hecho de que ya no tenga nada más que demostrar en el club del norte de Londres podría darle ganas de cambiar de aires.
Codiciado por el City hace dos años, antes de que el puesto en punta fuese cubierto por Haaland, Kane podría ser cortejado de nuevo por varios de los clubes más poderosos de Europa.
No ha descartado renovar y seguir siendo el estandarte de los 'Spurs'. Pero quiere poder elegir, y la Champions es la mejor vitrina para mostrarse. Una competición en la que, con 21 goles (en 30 partidos), sólo está a un gol de Olivier Giroud y sus 22 tantos (en 52 partidos).
hap-alu/iga/psr
