Teherán. Estados Unidos impuso este jueves sanciones económicas a la policía de la moral de Irán luego de la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una joven de 22 años arrestada por supuestamente usar el velo de manera inapropiada.
El Tesoro estadounidense dijo que la policía de la moral era "responsable" de la muerte de Amini y fundamentó las sanciones por "el abuso y la violencia contra las mujeres iraníes y la violación de los derechos de los manifestantes pacíficos iraníes".
Washington tomó la medida de las sanciones tras el estallido de violentas protestas en todo Irán, que dejaron un saldo de 17 personas muertas. Mujeres manifestantes quemaron velos y denunciaron la persecución de que son objeto de parte del gobierno.
Amini, una joven iraní de origen kurdo, había sido arrestada por la unidad de moralidad pública de la policía nacional. “Mahsa Amini fue una mujer valiente cuya muerte bajo custodia policial fue otro acto de brutalidad de las fuerzas de seguridad del régimen iraní contra su propio pueblo”, dijo la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen.
"Condenamos este acto inconcebible en los términos más enérgicos y llamamos al gobierno iraní a que ponga fin a su violencia contra las mujeres y a su violenta represión de la libertad de expresión y reunión", señaló en un comunicado.
En términos similares, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que “el gobierno iraní debe poner fin a su persecución sistemática de las mujeres y permitir las protestas pacíficas”. En un comunicado agregó que “Estados Unidos continuará expresando su apoyo a los derechos humanos en Irán y pedirá cuentas a quienes los violen”.
El Tesoro también impuso sanciones a Mohammad Rostami Cheshmeh Gachi, jefe de la policía de la moral, Haj Ahmad Mirzaei, jefe de la división de la policía de la moral en Teherán, y otros cinco altos funcionarios de seguridad involucrados en la represión de los manifestantes.
Las sanciones del Tesoro tienen como objetivo congelar activos que los designados puedan tener bajo la jurisdicción de Estados Unidos y prohibir que cualquier individuo o empresa estadounidense, incluidos los bancos internacionales con operaciones en el país, hagan negocios con ellos, limitando su acceso a las redes financieras globales.
La oenegé Iran Human Rights, con sede en Oslo, dijo que al menos 31 civiles habían muerto en una represión de las fuerzas de seguridad iraníes en seis noches de violencia.