Después de batir el récord mundial en las semifinales (12.12 segundos), la nigeriana Tobi Amusan conquistó el domingo el oro de los 100 metros vallas del Mundial de Eugene, donde la puertorriqueña Jasmine Camacho-Quinn se hizo con el bronce.
En la final, Amusan se impuso con un tiempo de 12.06 que esta vez no fue validado como nuevo récord mundial por el fuerte viento (2,5 m/s) en la pista del Hayward Field.
La jamaicana Britany Anderson fue plata (12.23) y Jasmine Camacho-Quinn bronce (12.23).
La puertorriqueña, campeona olímpica el año pasado en los Juegos de Tokio, se hizo así con su primera medalla en un Mundial.
"Este es mi primer campeonato mundial, así que solo quería venir aquí y divertirme", aseguró Camacho-Quinn, de 25 años.
"Para ser sincera, estaba nerviosa. Se me notaba en la cara, pero estoy contenta de haber venido aquí" afirmó la vallista, nacida en Charleston (Carolina del Sur).
"Tropecé con la última valla pero he acabado con una medalla y la tomo", dijo la puertorriqueña antes de alabar el récord logrado por Amusan.
"Ya dije que las vallas están evolucionando y que a partir de ahora solo van a ir más rápidas", señalo. "Lo hicimos bastante bien. Hoy ha habido récords. Creo que hemos hecho la mejor prueba de todo el Mundial".
La fase decisiva de las 100 metros vallas vivió un terremoto cuando Amusan, quien no había logrado hasta ahora una medalla mundial u olímpica, batió el récord mundial en las semifinales frente a la anterior poseedora, la estadounidense Kendra Harrison, quien fue descalificada en la final.
La nigeriana, exestudiante de la Universidad de El Paso (Texas), ya había demostrado estar en plena forma en Eugene tras batir el sábado su marca personal en las primeras series, situándola en 12.40.
Amusan fue cuarta clasificada tanto en el pasado Mundial de Doha-2019 como el año pasado en los Juegos Olímpicos de Tokio.
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