Ginebra. El acuerdo entre Ucrania y Rusia para facilitar la exportación de cereales ucranianos hizo posible bajar los precios de los productos alimenticios, indicó una responsable de las Naciones Unidas (ONU) que participó en las negociaciones, quien calificó el acuerdo de “éxito”.
Pero Rebeca Grynspan, secretaria general de la Cnuced, organización de la ONU encargada de comercio y desarrollo, manifestó sin embargo que es necesario bajar los precios de los fertilizantes, de los que Rusia es gran productor, para evitar una crisis alimentaria.
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Dos acuerdos fueron firmados el 22 de julio bajo patrocinio de la ONU, para posibilitar de un lado las exportaciones de cereales ucranianos bloqueados por la guerra y por otro las exportaciones de comida y fertilizantes rusos, pese a las sanciones impuestas por los países occidentales en Rusia.
El acuerdo es válido durante “120 días”, o sea, cuatro meses.
“La ONU espera que será ratificado, pues fue un éxito y un complemento importante para enfrentar la crisis alimentaria en el mundo”, indicó Grynspan, durante la presentación del informe anual de la organización sobre comercio y desarrollo.
“Superamos ahora el umbral de 5 millones de toneladas de cereales salidas de puerto ucraniano. Eso sin ninguna duda tuvo un efecto en los mercados” de ese rubro, dijo. Según la Cnuced, esta iniciativa a favor de los cereales del mar Negro, nombre dado al acuerdo, tuvo “un impacto significativo” en los precios de los productos alimenticios en el mundo.
El índice de precios de los alimentos de la FAO retrocedió por quinto mes consecutivo en agosto, el nivel más bajo desde hace siete meses. ”Estamos más o menos a nivel de los precios de antes de la guerra” en Ucrania, precisó Grynspan.
La funcionaria de la ONU, ex vicepresidenta de Costa Rica, enfatizó que los precios muy elevados de los abonos constituyen otro obstáculo importante para la normalización de ese mercado. Una reunión de los productores de abonos será organizada en París antes de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) en noviembre, en Indonesia, para intensificar la producción.