Berlín. La crisis “histórica” del coronavirus seguirá presente en 2021, advirtió este jueves la canciller alemana, Angela Merkel, en su mensaje de fin de año, en que defendió que la vacuna aporta “esperanza”.
"Estos días y estas semanas (...) son momentos difíciles para nuestro país. Y así durará bastante tiempo", aseguró la dirigente de la CDU en su último discurso de fin de año, antes de abandonar su cargo en otoño de 2021.
"Este invierno sigue siendo un momento difícil", añadió Merkel, quien dijo que la pandemia representa una "crisis histórica".
Durante meses considerada el alumno privilegiado de Europa en la gestión del covid-19, Alemania se enfrenta ahora a una agresiva segunda ola y adoptó un nuevo confinamiento parcial al menos hasta el 10 de enero.
"Los desafíos que conlleva la pandemia siguen siendo inmensos", insistió la canciller, que agradeció a la mayoría de alemanes el haber respetado las medidas de distanciamiento social para frenar el virus.
En total, 32.107 personas murieron por el covid-19 en Alemania, según los últimos datos del instituto de vigilancia sanitaria Robert Koch (RKI).
El balance diario de fallecidos superó el miércoles por primera vez en Alemania los 1.000 muertos, un récord que, según el RKI, también se debió a la acumulación de datos de varios días, ya que las autoridades sanitarias regionales habían transmitido informaciones incompletas por las fiestas de Navidad.
Merkel también aprovechó su intervención para criticar a los coronaescépticos, que organizaron multitudinarias protestas en Alemania desde el verano.
"No me puedo ni imaginar el rencor que sienten aquellos que viven el duelo por la pérdida de un ser querido por el coronavirus o los que sufren las secuelas cuando ven que algunos ponen en duda la existencia del virus o incluso la niegan", declaró.
"Las teorías del complot no solo son falsas y peligrosas, sino también cínicas y crueles hacia estas personas", añadió.
No obstante, Merkel auguró que 2021 debe ser el año de la "esperanza", sobre todo por la llegada de las vacunas.
"Desde hace unos días, la esperanza ya tiene un rostro: el de las primeras vacunas", inyectadas en las residencias de ancianos y el personal médico.
“Nunca antes, pese a la incertidumbre, habíamos tenido tantas ganas de empezar un nuevo año”, aseguró Merkel, que dirige el ejecutivo alemán desde hace 15 años.