El Kremlin indicó este jueves a Ucrania y a los países occidentales que no deben "preocuparse" por los movimientos de tropas rusas en la frontera ucraniana, pese al temor de Kiev de que el conflicto con los rebeldes prorrusos se agrave.
"Rusia desplaza a sus fuerzas armadas en su territorio como le parece", declaró el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov. "Pero eso no representa ninguna amenaza para nadie ni debe preocupar a nadie", puntualizó.
Tras la tregua de la segunda mitad de 2020, el conflicto en el este de Ucrania ha registrado desde enero varios enfrentamientos armados que han causado la muerte de 19 soldados ucranianos. Ambos bandos se culpan mutuamente de la escalada.
Además, Ucrania y Estados Unidos indicaron recientemente que se produjeron movimientos de las tropas rusas en Crimea, la península ucraniana anexionada por Moscú en 2014, y en la frontera ruso-ucraniana, cerca de los territorios controlados por los separatistas prorrusos.
"Estamos preocupados por las recientes escaladas de la agresión rusa en el este de Ucrania, incluyendo violaciones del acuerdo de alto el fuego del 20 de julio que provocaron la muerte de cuatro soldados ucranianos el 26 de marzo y que otros dos resultaran heridos", declaró el miércoles el portavoz de la Secretaría de Defensa de Estados Unidos, John Kirby.
Esta semana, el comandante en jefe de las fuerzas armadas ucranianas, Ruslan Jomchak, denunció una "amenaza para la seguridad militar" ucraniana, afirmando que los separatistas contaban con 28.000 combatientes y "más de 2.000 instructores y consejeros militares" rusos.
Moscú, acusado de apoyar política y militarmente a los separatistas desde que estalló el conflicto, en 2014, siempre ha negado haber desplegado efectivos o armas sobre el terreno.
Este jueves, Peskov insistió en que "los militares rusos [...] nunca participaron" en esta guerra.
Hasta la fecha, la guerra ha dejado más de 13.000 muertos.
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