Varios países, entre ellos Gran Bretaña y Dinamarca, se opusieron este jueves a la iniciativa del Comité Olímpico Internacional (COI) de buscar un "camino" que permita a los deportistas rusos y bielorrusos participar en los Juegos Olímpicos de París-2024 a pesar de la invasión de Ucrania.
Desde Kiev se sigue pidiendo que se impida a rusos y bielorrusos la participación en la cita de la capital francesa e incluso se amenazó este jueves con un boicot si se les autoriza.
"Nuestra posición no ha cambiado: mientras la guerra continúe en Ucrania, los deportistas rusos y bielorrusos no deberían participar en las competiciones internacionales", declaró este jueves el ministro ucraniano de Deportes, Vadym Gutzeït. "Si no somos escuchados, no descarto la posibilidad de que boicoteemos y rechacemos participar en los Juegos Olímpicos", añadió.
Rusia y Bielorrusia están excluidas de la mayor parte de eventos deportivos internacionales desde la invasión de Ucrania por parte del Ejército ruso en febrero de 2022. "Ningún deportista debería tener prohibida una competición únicamente por su pasaporte", estimó el COI esta semana en un comunicado al presentar una hoja de ruta para la reintegración de rusos y bielorrusos.
El Consejo Olímpico de Asia (COA) propuso por su parte este jueves integrar a los deportistas de Rusia y Bielorrusia en sus competiciones regionales, incluyendo los Juegos Asiáticos, mostrando su apoyo a la posición del COI.
La propuesta del COA podría permitir a los deportistas de ambos países tomar parte en sus fases de clasificación regionales de cara a París-2024.
La Organización Deportiva Panamericana (Panam Sports) también apoyó este jueves la hoja de ruta del COI: "Coincidimos con la posibilidad de permitir la participación en eventos deportivos a los atletas individuales con pasaportes rusos o bielorrusos que cumplan con lo establecido con el COI".
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se mantiene sin embargo firmemente en contra de cualquier intento de reintegrar a Moscú y Minsk en el mundo deportivo.
Michelle Donelan, ministra de Cultura británica responsable también de Deportes, estima que la iniciativa del COI está "muy alejada de las realidades de la guerra".
"Condenamos toda iniciativa que permitiría al presidente (Vladimir) Putin legitimar su guerra ilegale en Ucrania", declaró Donelan. "El presidente del COI, (Thomas) Bach, había condenado él mismo hace menos de un año a Rusia por haber violado la tregua olímpica y pidió dar una opción a la paz", recordó la ministra británica.
El jefe del Comité Olímpico de Dinamarca, Hans Natorp, subrayó que su país también se opone fuertemente al regreso de los rusos al mundo olímpico.
"La agresión rusa en Ucrania se intensifica", recordó en Twitter. "En estas circunstancias sería inaceptable permitir a Rusia y a Bielorrusia participar en eventos deportivos", señaló.
"Mantenemos con firmeza nuestra posdición. Todavía no es el momento de considerar su regreso", añadió.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, se mostró favorable a que los deportistas rusos y bielorrusos puedan participar en los Juegos Olímpicos bajo bandera neutral.
"No hay que privar a los atletas de su competición, pero pienso, como una gran parte del movimiento deportivo, en que no haya una delegación con bandera rusa", dijo Hidalgo a la cadena de televisión France 2.
El Comité de Organización de los Juegos Olímpicos de París no tiene voz en la decisión sobre la participación de los deportistas rusos y bielorrusos. El COI recordó el viernes que es la federación internacional responsable de cada deporte quien tiene en estos momentos la "única autoridad" sobre este asunto.
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