Ya es oficial. El rey de todos los ríos, que vierte en el océano Atlántico una quinta parte del agua dulce del planeta, nace a 5.179 metros sobre el nivel del mar, cerca del nevado Quehuisha, en la región sureña de Arequipa, Perú.
La prestigiosa Royal Geographical Society de Londres, una verdadera autoridad en materia de topología e hidrografía, no desmiente ni confirma el hallazgo. Desde Londres, ven los resultados verosímiles, pero no entienden que se pierda el sueño para averiguarlos.
Desde que el río fue bautizado en la primera mitad del siglo XVI, el lugar donde nacía este río –sus fuentes– fueron ubicadas en muchos sitios, alimentando el debate y la confusión de su largo. Ahora, gracias a la localización de la fuente, queda establecido que el río americano gana la batalla de longitud al Nilo, con 7.040 kilómetros frente a los 6.857 del río africano.
“Hemos tardado 12 años en confirmar los resultados de la expedición de Jacek Palkiewicz –explorador polaco que en 1996 localizó el manantial del gran río suramericano–. Ahora podemos estar seguros de que lleva la razón”, dijo Zaniel Novoa, vicepresidente de la Sociedad Geográfica de Lima.