Rita Segura vive en Copey de Dota, tiene 52 años, y desde hace unos diez meses, el aguacate es protagonista en su hogar.
Este cultivo es común en la zona donde vive y por lo general está presente en su mesa. Sin embargo, también reina en un pequeño laboratorio que instaló en su casa para elaborar productos cosméticos a partir de este fruto.
"Aprovecho la pulpa y el aceite de aguacate para hacer de manera artesanal jabones y champú. La fabricación la hacemos en familia, y ha sido de gran ayuda económica, sobre todo para mis hijos que están en la universidad. Es un trabajo maravilloso, todos nos involucramos en la elaboración", comentó la micro empresaria y madre de cuatro hijos.
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Ella comercializa sus creaciones bajo la marca Atir Cosmética Natural, en hoteles de la zona, y entre vecinos y amigos que ya conocen su trabajo.
Esta emprendedora fue una de las beneficiadas con una capacitación impartida por un grupo de investigadores y científicos del Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR), la Universidad de Costa Rica (UCR), la Universidad Nacional (UNA) y la Universidad Estatal a Distancia (UNED).
Dicha capacitación se brindó en la planta piloto agroindustrial de la Escuela de Agronegocios del ITCR. Participaron productores de Frutalcoop R.L y de la Asociación de Mujeres Artesanas de Copey de Dota.
El aguacate en el laboratorio
Elizabeth Arnáez, investigadora de la Escuela de Biología del ITCR, comentó que todo este programa se inició en los laboratorios de las universidades involucradas, donde se realizaron las pruebas preliminares.
"Los primeros análisis se hicieron en el Centro de Investigación en Biotecnología del Tecnológico, ahí en el laboratorio de bioprocesos, la pulpa del aguacate entró a estudio. Se determinaron sus características y la forma correcta de mezclar el fruto con otros ingredientes, con el propósito de crear la fórmula perfecta", explicó la investigadora.
En ese proceso tardaron aproximadamente seis meses. Simultáneamente, en el laboratorio de la Escuela de Química de la UCR, se realizaron los análisis del extracto del aceite de la semilla.
Ambos estudios se mantienen, pero con la información existente, el equipo investigador identificó el procedimiento y la receta ideal, en cuanto a textura y amalgama para los jabones, las cremas y el champú.
"El reto era tener esa fórmula base, ya eso existe, es una receta muy natural, lleva algunos químicos, principalmente para que el producto se conserve, que no se contamine, y que mantenga sus beneficios y su forma", concluyó Arnáez.
Ella explicó que se eligió esta fruta por los atributos ya conocidos, pero también por ser uno de los productos que más se cosecha en Copey de Dota.
Adicionalmente, la iniciativa contribuye a la utilización más racional de los recursos productivos como el agua, el suelo y el esfuerzo de estos agricultores, para hacer que estos productos no se desperdicien, sino más bien, que se les pueda dar una mayor utilización y una opción adicional de consumo saludable.
Seidy Rodríguez pertenece a las mujeres artesanas de Frutalcoop R.L., grupo que participó en los talleres. Ella aseguró que estas capacitaciones empoderan a las mujeres de la zona, les permiten aprovechar su producto agrícola de forma distinta, con un valor agregado de mucha aceptación, bajo un modelo artesanal novedoso.
"En la actualidad todos queremos productos más limpios, sin tanto químico, recibir esta capacitación fue muy importante porque nos enseñan a aprovechar los recursos y a hacerlo con recetas probadas en laboratorios y por expertos, mucho más natural de lo que existe en el mercado", concluyó la artesana.
¿Qué contiene el aguacate?
Vitamina E. Es un potente antioxidante que protege la piel de los radicales libres. Estos son los que dañan células, tejidos y órganos, jugando un papel fundamental en el envejecimiento.
Vitamina C. Para los niños esta vitamina contribuye al crecimiento. Ya de adultos, se encarga de reparar tejidos del cuerpo. Ayuda en la formación de colágeno, proteína que mantiene la elasticidad de la piel. Es esencial para la cicatrización y mantenimiento de cartílagos y huesos. Además, fortalece el sistema inmunológico y previene las enfermedades respiratorias.
Vitamina A. Es fundamental para la piel, previene el acné, las manchas producidas por el sol y otros daños cutáneos, además, favorece la cicatrización.
Para el cabello. El aguacate da brillo y sedosidad al cabello. Hidrata el cuero cabelludo, además de proteger y reparar las fibras capilares, evitando la caída.
El aceite de aguacate está compuesto 85% por glicéridos ácidos grasos insaturados, por lo que se absorbe más rápido que cualquier otro aceite vegetal, permitiendo una hidratación profunda de la piel. Es ideal para pieles secas o maltratadas por el sol.