Para Phumzile Mlambo-Ngcuka, el progreso y el desarrollo mundial solo serán posibles si todas las personas tienen los mismos derechos y oportunidades para prosperar. La directora ejecutiva de ONU Mujeres —quien fue vicepresidenta de Sudáfrica entre 2005 y 2008 y se convirtió en la mujer de más alto cargo en la historia del país— afirma que la innovación y la tecnología con una perspectiva de género son claves para romper las barreras cotidianas.
En ese sentido, cuenta en esta entrevista para el Grupo de Diarios América, ONU Mujeres ha desarrollado planes para ofrecer educación de ciencias y tecnología a mujeres, niñas y jóvenes que no han tenido acceso a estudiar estas materias debido a los altos niveles de pobreza, el aislamiento geográfico, el matrimonio precoz o embarazo, los conflictos o los desastres humanitarios.
También, comentó Mlambo-Ngcuka, la organización está preparando plataformas empresariales para mujeres en la agricultura, los servicios públicos y el comercio.
—¿De qué forma y hasta qué punto la innovación y la tecnología son herramientas efectivas en la eliminación de las barreras de género?
Ya sea a través de la planificación urbana diseñada para transportarse seguramente, las guarderías infantiles que ofrecen soluciones positivas para el cuidado de los niños y niñas o el uso de datos biométricos para reemplazar los documentos de registro formales sobre los que muchas mujeres no tienen acceso o control, la innovación y la tecnología con una perspectiva de género son cruciales para eliminar las barreras y acelerar el progreso hacia la igualdad de género.
"La innovación y la tecnología reflejan a sus diseñadores y fabricantes. Si existe un desequilibrio de género en el número de innovadores, diseñadores o líderes, es muy probable que la infraestructura o los servicios que se están desarrollando no tengan en cuenta las necesidades y contribuciones específicas de las mujeres y las niñas.
"Estos cambios no solo son buenos para las mujeres y las niñas, sino que a menudo conllevan un impacto transformador para otros grupos de la población que no reciben suficiente atención y servicios. Cuando nos enfocamos en aquellos que son menos escuchados y menos visibles estamos abordando algunos de los problemas sociales de mayor alcance que nos están impidiendo el progreso que queremos ver para todos.
"Por otro lado, para garantizar el acceso a esas áreas se debe resolver una serie de problemas, incluidos el costo, la cobertura, la seguridad y el acoso, las normas sociales y los estereotipos negativos en torno a la ciencia, las matemáticas y la ingeniería como campos ‘masculinos’. A los 6 años, las niñas ya consideran que los niños se muestran brillantes y se adaptan mejor a las actividades ‘realmente inteligentes’ que su propio género. Hoy, 1.100 millones de niñas deben tener la oportunidad de desafiar el statu quo y, como hemos visto en las recientes marchas por la acción climática en Europa y en otros lugares, están listas para hacerlo”.
—¿Cómo los países pueden romper ese “molde” e incentivar el ingreso de la mujer en innovación, ciencia y tecnología?
Las y los líderes tienen un papel fundamental que desempeñar para impulsar estrategias gubernamentales innovadoras y transformar las prácticas institucionales tradicionales para integrar la igualdad de género, pero en todos los niveles gubernamentales, privados y públicos, las mujeres a menudo están insuficientemente representadas en los puestos de decisión.
"Necesitamos una cooperación y un diálogo estrecho entre el personal educativo y de capacitación, quienes son responsables de las políticas públicas, la interlocución social, el sector privado, la innovación y otros. Junto con el cambio de políticas públicas, necesitamos un cambio crítico en las actitudes hacia las niñas en cuanto a la tecnología y los estereotipos negativos sobre ellas, replanteando el número y visibilidad de niñas líderes en los medios y mostrándolas en sus verdaderos roles como inventoras y creadoras”.
—¿Cuál es, según la ONU, el rol de los hombres en este escenario?
La igualdad de género solo se puede lograr si los hombres comparten la responsabilidad de trabajar junto a las mujeres para corregir las dinámicas que dificultan el progreso.
"Las decisiones y los comportamientos de los hombres están profundamente influenciados por estas expectativas relacionadas con la masculinidad. Las normas sociales y culturales sobre las masculinidades sustentan las relaciones de poder y la desigualdad de género. En un contexto negativo, esto tiene vínculos estrechos con la violencia contra las mujeres y el control, ya que muchos niños crecen creyendo que el comportamiento dominante hacia las niñas y las mujeres es parte de ser un hombre.
"En ese sentido, nuestro movimiento He for She (él por ella) está construyendo solidaridad global con cambios de comportamiento y actitud que vienen de los mismos hombres, y los libera de comportamientos y expectativas limitados y desactualizados, a la vez que apoyan el cambio para mujeres y niñas.
"Necesitamos hombres que lideren con el ejemplo dentro de su familia y en su comunidad al tratar a mujeres y hombres por igual, al desafiar los estereotipos de género en todas las esferas de la vida y al compartir equitativamente las responsabilidades familiares y del hogar.
"Necesitamos que actúen decididamente para detener la violencia contra las mujeres, no ser espectadores ni partícipes, denunciarla y objetar la impunidad.
"Hice un llamado a los hombres a que tomen una posición para poner fin a las prácticas dañinas como el matrimonio precoz simplemente negándose a casarse con una niña, o para terminar con la exclusividad en los foros de toma de decisiones rechazando participar en paneles integrados únicamente por hombres. Hay muchas maneras, grandes y pequeñas, en que ellos pueden hacer una diferencia en sus propias vidas y en las vidas de los demás”.