París
Europa lanzó anoche dos nuevos satélites del programa Galileo, siete meses después del revés que sufrió por no colocar en la órbita adecuada otros dos, retrasando este ambicioso programa que pretende competir con el GPS estadounidense.
"Estoy encantado (...) de decirles que Adam y Anastasia están en la órbita que debían estar", declaró el presidente de Arianespace, la empresa encargada de organizar el lanzamiento.
"Es por tanto un éxito total", sostuvo.
Según la Agencia Espacial Europea (ESA), los dos satélites llegaron a la órbita prevista, situada a una altura de 23.500 kilómetros, tres horas y 48 minutos después de su lanzamiento.
Un cohete ruso Soyuz que llevaba el sétimo (Sat-7) y octavo (Sat-8) satélites de esta "constelación", que contará con 30, salió de la Guyana francesa ayer viernes.
Tras el despegue del Centro Espacial Guyanés (CSG), el vuelo de los tres módulos inferiores del Soyuz duró nueve minutos. Fregat, el cuarto módulo, se separó del resto del cohete y encendió su motor, llevándose consigo los dos satélites fabricados por la empresa alemana OHB.
"Este lanzamiento marca la reanudación del despliegue de la constelación Galileo", dijo el director general de la ESA, Jean-Jacques Dordain, citado en un comunicado.
"Hemos superado una etapa más para dotar a Europa de un sistema mundial de navegación por satélite", destacó en un comunicado la comisaria europea de Industria, Elzbieta Bienkowska.
Galileo, que fue decidido a principios de los años 2000, pretende que Europa deje de utilizar el GPS (Global Positioning System) estadounidense. Pero con el tiempo, el programa ha ido acumulando retrasos por diferentes razones y los costes se han disparado.
El sistema estadounidense, más antiguo, tiene una precisión de tres a ocho metros mientras que la del europeo será de un metro.
El 22 de agosto, el programa Galileo sufrió un serio revés cuando el Fregat colocó en una órbita distinta dos satélites, el Sat-5 y el Sat-6.
Una comisión investigadora determinó que el problema fue provocado por la congelación del carburante debido al diseño de los tubos de alimentación del Fregat, según Arianespace, empresa encargada de organizar el lanzamiento.
A finales de enero, la Comisión Europea, que financia el 100% de Galileo, dio luz verde para que se reanudara el programa de lanzamientos por Soyuz en marzo.
"Con estos seis nuevos satélites que deben funcionar para antes de fin de año, estamos logrando la velocidad de crucero para la producción, los ensayos y el despliegue de los satélites de la constelación", dijo Didier Faivre, director del programa Galileo de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Según la agencia, en el 2015 se van a lanzar otros cuatro satélites Galileo.
Galileo contará al final con 30 satélites.
Cuatro satélites test realizados por un consorcio dirigido por Airbus Defence and Space (ex-Astrium), fueron lanzados en el 2011 y 2012. Pero uno de ellos ha tenido un problema y no puede funcionar correctamente para la función de navegación.
La Comisión Europea ha comprado 22 satélites fabricados por OHB. Europa espera que a partir de finales del 2016, Galileo tenga 14 satélites en órbita y pueda prestar los primeros servicios a los usuarios, con más funciones de las que ofrece el GPS, pues los dos sistemas son compatibles.
El objetivo de la Comisión Europea es que la constelación Galileo esté totalmente operativa para el 2020.
"La misión Galileo necesita 24 satélites pero nosotros queremos tener seis más de recambio", dijo Faivre.
Por el momento, Europa ha comprado 26 satélites y tendrá que encargar de aquí a principios del próximo año más.
El programa Galileo ya ha costado unos 5.000 millones de euros. En el periodo 2014-2020, Europa ha previsto gastar 7.000 millones de euros.