
San José
Los vientos solares ejercieron y siguen ejerciendo una gran influencia para volatilizar la atmósfera de Marte la cual hoy es delgada y tenue.
Después de casi dos años de su lanzamiento, la sonda espacial MAVEN de la NASA, ha recabado información para intentar explicar qué fue lo que le sucedió a la atmósfera así como al agua que una vez hubo en el Planeta Rojo.
En una conferencia de prensa realizada esta tarde en la sede de la NASA en Washington, varios expertos paticipantes en la misión revelaron que los vientos solares – descargas de energía provenientes del Astro Rey– prácticamente "empujaron" los gases de la atmósfera marciana hacia el espacio.
"Marte parece haber tenido una atmósfera gruesa y lo suficientemente caliente como para albergar agua líquida, que es un ingrediente clave para la vida tal como la conocemos actualmente", declaró John Grunsfeld, astronauta y administrador asociado para la Dirección de Misiones Científicas de la NASA en Washington.
La sonda – que ingresó a la órbita de Marte el 21 de setiembre del 2014– realizó mediciones en la atmósfera superior del Planeta Rojo y determinó que los iones (átomos con carga eléctrica) se "escapan" o se volatilizan a una mayor velocidad durante las explosiones solares.
Tras analizar los datos recopilados por la sonda, los científicos concluyeron que las ráfagas de viento solar remueven cerca de 100 gramos de gases por segundo. Los principales gases que se "escapan" son oxígeno y dióxido de carbono,