Ocho lanzamientos de cohetes y una miniestación en órbita lunar para 2024: el jefe de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (Nasa) presentó el jueves el calendario del programa Artemisa, que llevará a los astronautas a la Luna por primera vez desde 1972.
El administrador de la agencia espacial de Estados Unidos, Jim Bridenstine, confirmó que Artemisa 1 sería una misión no tripulada alrededor de la Luna, planeada para 2020.
Después vendrá Artemisa 2, una misión alrededor de la Luna con astronautas a bordo, "cerca de 2022".
Finalmente, Artemisa 3 colocará en 2024 a los astronautas en la superficie de la Luna, entre ellos a la primera mujer. Sería el equivalente a la misión Apolo 11, que llevó a Neil Armstrong y Buzz Aldrin a nuestro satélite natural en julio de 1969.
Estas tres misiones serán lanzadas por el cohete más grande que existe, el Space Launch System (SLS), que se construye actualmente aunque con retrasos respecto del calendario original. De hecho varios expertos creen que el primer vuelo programado para 2020 deberá postergarse. El SLS llevará la cápsula tripulada Orion.
A estas misiones "100% NASA" se agregarán cinco entregas de elementos de la "Getaway", la miniestación en órbita lunar que recibirá a los astronautas y les servirá de punto intermedio.
Cinco esperanzas
Estos cinco lanzamientos se llevarán a cabo entre 2022 y 2024 por compañías espaciales privadas, contratadas por la Nasa.
En un primer momento, la estación será minúscula: un elemento propulsor y un pequeño elemento de habitación. En 2024, los astronautas procedentes de la Tierra se amarrarán a ella.
Luego bajarán hasta la Luna a bordo de un aterrizador, que habrá sido llevado a la estación previamente. Una parte de ese módulo de descenso permanecerá en la Luna y otra permitirá a los astronautas despegar para unirse a la estación, donde podrán volver a subir a la nave Orion y regresar a la Tierra.
Bridenstine anunció este jueves que la agencia espacial estadounidense eligió a la compañía Maxar para fabricar el primer módulo de la estación, el que suministrará energía gracias a grandes paneles solares.
En los próximos meses, la Nasa tendrá que elegir quién hará el módulo de alunizaje. Todos los grandes grupos aeroespaciales como Boeing o Lockheed Martin, así como nuevas empresas del sector como Blue Origin, están interesados.
El objetivo no es la Luna, recordó Bridenstine. “No vamos a construir una nueva Estación Espacial Internacional”, dijo. “Nuestra meta es ir a Marte, no quedarnos bloqueados en la Luna”.