Investigadores de la Universidad Nacional (UNA) y la Universidad de Utrecht en Holanda descubrieron en la miel de abejas sin aguijón proteínas más potentes que los antibióticos comunes para destruir colonias de bacterias.
¿Cómo dieron con el hallazgo? De acuerdo con el coordinador del Programa de Microbiología y Química Medicinal del Centro de Investigaciones Apícolas Tropicales de la Universidad Nacional (Cinat-UNA), Gabriel Zamora, tras varios años de investigación, los científicos empezaron a ver que las bacterias ya no se comían el antibiótico, sino que, por el contrario, desarrollaban una estrategia protectora y se organizaba en un biofilm.
Este es una estructura en la que las bacterias y otros microorganismos viven en nuestro planeta, explicó el investigador al señalar que se trata de pequeñas comunidades que se comunican, alimentan, reproducen y mueren.
"Ellas (las bacterias) crean una fortaleza en distintos niveles, algunas se adhieren al biofilm, otras están suspendidas dentro del biofilm y algunas otras migran para crear nuevos biofilms. El antibiótico funciona si las bacterias se comportan de una misma forma, pero en estas comunidades cada una es distinta y es ahí cuando el medicamento pierde su efectividad", explicó Zamora.
De acuerdo con el investigador, algunos estudios han determinado que entre el 60 y el 80 por ciento de las infecciones son causadas por biofilms, y las opciones para acabar con estos, son escasas.
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Es entonces cuando, a partir de un biofilm en una herida infectada, las bacterias se diseminan por todo el cuerpo, causando, en el peor escenario, la muerte.
En la actualidad existen pocos tratamientos que inhiben la creación de biofilms y tampoco se pueden eliminar los que ya se han desarrollado.
Por esta razón, y conociendo las características antioxidantes y la rápida capacidad para la regeneración de tejidos en quemaduras y heridas de la miel de abejas sin aguijón, el producto se convirtió en el objeto de estudio del Cinat-UNA en conjunto con la Universidad de Utrecht en Holanda.
Búsqueda de resultados
La finalidad del proyecto era determinar si las particularidades de la miel tenían algún efecto positivo en el combate de la Staphylococcus aureus, bacteria causante de las mayores afectaciones en heridas y quemaduras.
Tras más de 10 años de investigación, Zamora, quien hizo de este tema su tesis doctoral, logró comprobar que en efecto la miel de abejas sin aguijón contiene dos proteínas nunca antes descritas con la capacidad no solo de inhibir la creación de biofilms de Staphylococcus aureus sino también de eliminarlos.
"Para llegar a este resultado, inicialmente trabajamos con la miel de Mariola y la de Jicote gato (ambas de abejas sin aguijón). Luego, con la miel de Mariola realizamos extracciones orgánicas que no tuvieron resultados positivos. Posteriormente, realizamos aislamientos guiados por actividad antibiofilm mediante diálisis, técnicas cromatográficas y electroforesis.
"Fue así como logramos determinar que la miel de Mariola contiene dos proteínas capaces de destruir un biofilm de Staphylococcus aureus y, aunque no conocemos el mecanismo por el cual se destruye, sí pudimos establecer la hipótesis de que las proteínas tienen como objetivo atacar polímeros de la estructura del biofilm, ya que un daño en la matriz de polímeros destruiría el biofilm y dejaría expuestas a las bacterias a los efectos de los antibióticos", explicó Zamora.
Los investigadores, notaron que al combinar estas proteínas con los antibióticos tradicionales, estos recuperaban su capacidad para matar las bacterias y se inhibía la creación de nuevos biofilms.
El investigador añadió que la miel de abejas sin aguijón es un mercado poco explorado, pues para la mayoría de la gente confunde este insecto con un mosquito.
Junto a este proyecto, el Cinat también busca fomentar el trabajo de los meliponicultores para que comercialicen este producto.