El Cairo. EFE. Arqueólogos egipcios rescataron de entre las arenas de Saqara, al sur de El Cairo, los restos de la pirámide de la reina Sesheshet, quien formó parte del imperio faraónico hace 4.300 años.
Zahi Hawas, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto, mostró ayer al mundo el último tesoro que el país ha salvado del olvido y la arena.
“Es un descubrimiento muy importante. Estamos acostumbrados a encontrar una tumba, o una estatua, pero hoy anunciamos el hallazgo de la pirámide de una reina”, resaltó Hawas.
Cuatro milenios después de su construcción aún se mantienen en pie cinco metros de la estructura original, que en el pasado llegó a medir 15 metros con una inclinación de 51 grados.
Los restos fueron localizados en las afueras de El Cairo, en el complejo funerario de Saqara, donde también se encuentra la pirámide escalonada de Zoser y que fue parte de la necrópolis de Menfis.
El arqueólogo destacó que se trata “de una de las pirámides más importantes de la quinta dinastía” del Imperio Antiguo.
Sesheshet, reina de Egipto, fue la madre del rey Teti (2323-2291 a.C.), primer faraón de la sexta dinastía, cuya pirámide está a pocos metros de la presentada hoy.
“Aún no hemos entrado en la cámara de la pirámide”, comentó Hawas, pero pronosticó que en su interior encontrarán “inscripciones que hablen de Sesheshet”.
Sin embargo, el equipo que trabaja en los restos no podrá rescatar mucho más.
Esta pirámide, como muchas otras, fue víctima del saqueo, y aún hoy se puede observar un amplio agujero por el que, se supone, entraron los ladrones.
Los expertos también han localizado durante las excavaciones una capilla construida durante el Imperio Nuevo, en la que se conservan restos de escritura faraónica, así como parte del revestimiento de la pirámide.
Hawas concluyó que este monumento fue levantado para Sesheshet tras estudiar el contexto histórico y otros descubrimientos en la zona, donde investiga desde 1988.
El arqueólogo mencionó un “papiro médico” en el que la reina pedía consejo sobre unos problemas con su cabello. También comentó que las pirámides de las dos esposas de Teti, Khuit e Iput I, ya fueron localizadas en el pasado, y resaltó que no se tiene conocimiento de más reinas ligadas a este faraón.
Por ello, y a pesar de la ausencia de pruebas definitivas, Hawas está convencido “al cien por cien” de que los restos pertenecen a la pirámide de la reina Sesheshet.
“Descubrir una pirámide te hace feliz, es increíble”, aseguró el famoso arqueólogo.
“Siempre digo que se desconocen los secretos que esconden las arenas de Egipto ” , sentenció.