Con miradas curiosas, plumajes amarillentos o grisáceos y movimientos juguetones, tres de las 221 especies de aves que migran por el país ya empezaron a observarse en Cartago.
Así lo reportaron esta semana especialistas del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (Catie), en Turrialba. Desde enero de este año, un equipo científico realiza en el país un monitoreo constante de estas especies migratorias y hasta experimentan con seis distintos tipos de suelo (con diferentes usos) para identificar cuáles son los sitios y plantas que más atraen a estos animales.
Según los científicos, los primeros visitantes emplumados del año son la reinita pechirrayada, la reinita amarilla y el pibí occidental. De ellos se han contabilizado decenas de individuos.
La reinita pechirrayada ( Wilsonia canadensis ) destaca por su pequeño tamaño y su intenso color amarillo en el pecho. Esta ave mide 12 centímetros y pesa apenas unos diez gramos. Con frecuencia este tipo de ave levanta la cola para mostrar su alegría, lo cual gusta mucho a los turistas y siempre intriga a los investigadores.
Por su parte, la reinita amarilla ( Dendroica petechia ) es una de las especies migratorias más abundantes y comunes. Mide 11,5 centímetros y pesa nueve gramos. Es la única ave reinita cuya cola es amarilla. “Esta es una de las primeras en llegar y de las últimas en regresar”, señalan los expertos.
Finalmente está el pibí occidental ( Contopus sordidulus ), que no es amarillo sino grisáceo. Este es el más grande de los tres. Mide 14 centímetros y pesa 13,5 gramos.
“Entre setiembre y octubre, la mayoría de los individuos de más de 200 especies de aves migran desde los países del hemisferio norte con climas templados hacia las regiones más cálidas de Suramérica”, comentó la ornitóloga Carmen Hidalgo, de la Universidad Nacional (UNA).
“De febrero a mayo, estas especies vuelven o regresan del sur hacia el norte para reproducirse. Este es un ciclo biológico preciso y exacto, rigurosamente controlado por las condiciones climáticas, en especial la duración del día (fotoperíodo) y la temperatura, por lo que podría alterarse seriamente si se produce un cambio en el clima del orbe”, agregó.
En los próximos meses los científicos del Catie esperan la visita de otras aves como la calandria, las tangaras (pájaros rojos similares a las viudas) y el cacique veranero (de color anaranjado).