La casona de adobe de Nicanor Badilla, en Alajuelita, declarada patrimonio en el 2002, está rodeada de problemas y líos legales.
La casona de adobe de Nicanor Badilla, en Alajuelita, declarada patrimonio en el 2002, está rodeada de problemas y líos legales.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.