EscucharGrupo: Women’s Link Worldwide
Nacionalidad: colombiana
Profesión: abogada
¿Cuál era la situación legal del aborto en Colombia?
En Colombia había una penalización total del aborto. El 14 de mayo del 2005 se interpuso una demanda ante la Corte Constitucional para que no fuera delito en tres causales: cuando la vida y la salud de la mujer está en peligro; cuando el embarazo es causa de violación, incesto o fertilización no consentida; y en casos de malformaciones incompatibles con la vida luego del parto. El 10 de mayo del 2006 falló a favor.
¿Qué pudo ayudar a ello?
Antes de poner el recurso formamos una red nacional que envió a los magistrados cientos de opiniones sobre el tema. Enviamos estudios de universidades, como Yale y Harvard, sobre el aborto en Colombia. Expertos en bioética, ginecología y obstetricia, entre otros, mandaron estudios, libros completos con evidencia científica sobre el tema.
¿Cuál fue su estrategia fuera del espacio judicial?
Diseñamos una estrategia de alto impacto que no solo consistía en plantear la demanda legal, sino también en propiciar un debate público del tema.
“Contratamos una agencia de comunicación que nos ayudó a construir mensajes claves, basados en datos científicos sobre el aborto. También participamos en foros en las universidades, en centros médicos, comunidades y reunimos opiniones de médicos, expertos en derechos humanos, grupos de mujeres, entre otros”.
¿Qué efecto tuvieron?
Cuando comenzó el debate el 80% de la población respondía que no estaba de acuerdo con el aborto. A la mitad del proceso, el 54% se mostró a favor y, cuando salió el fallo de la Sala Constitucional, más del 60% se manifestó a favor de la decisión.
¿Cómo hicieron frente al debate moral y religioso?
Repitiendo, una y otra vez que el aborto es un tema de salud pública, de equidad de género y de justicia social. Recordando que las colombianas éramos parte del 4% de la población mundial con legislaciones restrictivas. Señalando que cada año fallecen al menos un 10% de las 400.000 mujeres que abortan en Colombia.
¿Qué posición adoptaron ante la Iglesia Católica colombiana?
Antes de presentar la demanda, analizamos el debate que se había dado en los medios sobre el aborto y hallamos que la iglesia era una voz con gran fuerza.
“Al analizar sus argumentos nos dimos cuenta que no podíamos debatir con ellos porque nuestro discurso era sobre el derecho e las mujeres, no sobre el derecho canónico. Al final, decidimos no debatir con la Iglesia”.
¿Qué sigue ahora?
Procurar que el derecho sea un hecho. El aborto no es una decisión fácil para ninguna mujer, pero tiene derecho a elegir.
