La prohibición de fumar en sitios públicos, la existencia de programas gratuitos para apoyar a quienes desean dejar de fumar y las múltiples campañas de comunicación sobre los daños al tabaco hacen de Costa Rica un país bastante avanzado en la lucha contra el fumado.
El Informe sobre la epidemia mundial del tabaco 2013, revelado ayer por la Organización Mundial de la Salud (OMS), reconoce y celebra esto. Sin embargo, también señala que el país todavía tiene deudas pendientes.
Por ejemplo, según el reporte, Costa Rica es parte del 6% de los países que no tiene regulaciones totales sobre el tema de publicidad y patrocinio y sugiere que aquí falta aún una mayor restricción a los anuncios y la posibilidad de que las empresas que se dedican a la distribución de cigarrillos patrocinen ciertos eventos sociales.
En el mundo, se calcula que el 78% de los jóvenes de 13 a 15 años de edad están expuestos diariamente a alguna forma de publicidad, promoción y patrocinio del tabaco.
Esta publicidad no se da solo en los medios de comunicación tradicionales. Las tabacaleras también se valen de Internet, redes sociales, bares, discotecas y programas de beneficencia para hacer promoción a su producto. “Limitar estos mensajes es una manera eficaz de proteger a los jóvenes para que no comiencen fumar y, así, reducir el consumo de tabaco de toda la población”, afirmó en un comunicado Douglas Bettcher, director de Prevención de las Enfermedades No Transmisibles de la OMS.
Otros pendientes. El informe también señala que Costa Rica aún debe colocar advertencias más gráficas y con mayor espacio en las cajetillas de los cigarrillos.
Sobre este tema, la presidenta de la República, Laura Chinchilla, ya firmó el reglamento y se está a la espera de su publicación en La Gaceta .
“Las advertencias gráficas son la medida que más beneficios ha traído a la reducción del fumado en otros países, por lo que lo consideramos importante”, comentó Sissi Castrillo, viceministra de Salud. Este ente se encargó de seleccionar las imágenes que se pondrán en las cajetillas.
Otro de los pendientes que la OMS le indica a Costa Rica en su reporte, es la urgencia de realizar campañas de comunicación “más agresivas”, que puntualicen en los efectos nocivos del tabaco. Estas iniciativas deben involucrar nuevos medios, como las redes sociales, apunta el reporte.
Esto podría ser particularmente útil al país porque en las redes se desenvuelven los más jóvenes. Datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) del 2011 muestran que la edad de inicio del tabaquismo son los 17 años.