María Elena Carballo, ministra de Cultura, reiteró ayer su compromiso con la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Intangible y se comprometió a tomar medidas para identificar, conocer y preservar las expresiones que integran ese patrimonio.
El año pasado, Costa Rica ratificó ese documento internacional, promovido por la Unesco, en el que se busca proteger el patrimonio vivo de las sociedades; es decir, sus tradiciones y expresiones orales, sus artes del espectáculo, sus festividades y rituales, su cosmovisión y sus técnicas artesanales .
Ayer, en una presentación oficial de la convención a diversos grupos e instituciones, Carballo afirmó que en los próximos tres meses –tiempo que tardará el documento en entrar en vigencia en el país– nombrará a la Comisión Nacional del Patrimonio Intangible.
Este grupo estará integrado por nueve personas, entre los que se destacan representantes del Ministerio de Cultura, del Centro de Patrimonio, del Icomos de Costa Rica, del Ministerio de Educación Pública y de grupo independientes de cultura popular.
Tal Comisión no solo se encargará de emitir criterio sobre el carácter patrimonial de las expresiones, sino que también promoverá la realización de inventarios acerca cuál es el patrimonio cultural intangible que existe en Costa Rica.
Asimismo, se encargará de asesorar a las instancias públicas y privadas que trabajen en el tema de la conservación, preservación, difusión y protección de las manifestaciones culturales patrimoniales.
Por ahora, se trabaja en el plan de acción para salvaguardar la tradición del boyeo y la carreta, el cual fue declarada como Obra Maestra del Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad en el 2005.