Más de la mitad de las pacientes que usaron terapia de reemplazo hormonal experimentaron de nuevo los síntomas del climaterio tras dejar el tratamiento.
Así lo reportó un estudio publicado en la última edición de la revista Journal of the American Medical Association .
Los investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts, Estados Unidos, querían determinar qué sucedía con los síntomas de la menopausia, como los calores, la resequedad vaginal y los sudores nocturnos, cuando las mujeres dejaban de usar hormonas.
Para ello, evaluaron a 8.405 mujeres con una edad promedio de 69 años.
Ellas participaron en el estudio estadounidense Iniciativa para la Salud de la Mujer (WHI por sus siglas en inglés).
El estudio WHI es la mayor investigación hecha sobre terapia hormonal. Incluyó a 16.608 mujeres entre los 50 y los 79 años (el 70% tenía más de 60 años).
Seis años con hormonas. Durante casi seis años, la mitad de las pacientes del estudio WHI tomó un tratamiento hormonal de estrógeno más progestina.
El resto recibió solamente un placebo (medicamento sin ninguna acción terapéutica).
El 8 de julio del 2002 los investigadores suspendieron el estudio al hallar efectos secundarios que consideraron de riesgo.
Un buen número de pacientes optó por dejar las hormonas, una situación que le permitió a los médicos ver cómo reaccionaba el organismo sin ese tratamiento.
Para registrar los síntomas, enviaron 9.000 encuestas a los ocho y doce meses después de la suspensión del tratamiento.
De ese grupo, contestaron 8.405 voluntarias -una parte usó hormonas y otro el placebo-.
Entre quienes usaron hormonas, el 55% volvió a sufrir sofocamientos, cambios de humor y calambres de la menopausia.
Un 21 por ciento de las participantes a las que se suministró el placebo, aseguró también que volvió a sentir los males típicos del término de la menstruación.
Pros y contras. Una consideración importante de los resultados es que una tercera parte de las mujeres con esos síntomas tenía entre 60 y 70 años.
Ese aspecto motivó una acalorada discusión sobre la validez del trabajo para otras poblaciones.
El estudio WHI concluyó que existe un mayor riesgo de sufrir de un cáncer de mama, como resultado de la terapia hormonal.
En su reciente visita al país, el investigador Manuel Neves-e-Castro aclaró que el incremento es de solo un 0,8.
"Por cada 1.000 mujeres de 63 años que no usan hormonas, tres sufrirán espontáneamente de cáncer de mama. El estudio WHI encontró que por 1.000 pacientes que sí usan estrógenos habrá 3,8 casos de cáncer de mama -0,8 de más-", dijo el reconocido investigador portugués, creador del Día Mundial de la Menopausia.