Los programas de chequeo médico que monitorean la salud cardíaca de los atletas reducen las muertes súbitas, demostró un estudio italiano publicado por la revista JAMA.
El estudio en un período de 25 años halló una reducción del 89% en las muertes anuales por males cardiovasculares repentinos entre deportistas italianos.
La mayoría de los atletas jóvenes que mueren repentinamente tienen enfermedades cardíacas insospechadas por sus médicos.
Por ello, la evaluación estricta en los deportistas eleva las posibilidades de hallar a tiempo problemas potencialmente mortales.
Desde 1982 existe en Italia legislación que obliga a realizar exhaustivos exámenes a los atletas antes de incorporarse al medio.
Además, los atletas deben tener un estricto seguimiento.
Cerca del 2% de los deportistas son descalificados por condiciones cardíacas.
Para medir el resultado de estas pruebas, científicos de la Universidad de Padua analizaron datos estadísticos sobre muertes súbitas por problemas cardíacos entre atletas.
Ellos revisaron datos de atletas de entre 12 y 35 años de la región de Venetto, en el noreste de Italia.
Su estudio abarcó el período de 1979 al 2004, a fin de tener el escenario anterior y posterior a la aplicación de la normativa de 1982,
Efectivo. Tras el análisis estadístico, los expertos hallaron que el número de muertes súbitas bajó un 89% durante ese período.
En el tiempo que duró el trabajo hubo 55 muertes súbitas cardiovasculares entre atletas que habían sido evaluados anteriormente.
Esto se comparó con 265 fallecimientos por esta causa en la población general no controlada.
Además, en un grupo de 46.000 atletas que participaron del estudio, el 2% fue descalificado por males cardíacos.
“El control realizado antes de que se permita la participación deportiva es una herramienta para salvar vidas que debería ser utilizada en todas partes, incluido Estados Unidos, donde no existe un sistema como este”, dijo Gaetano Thiene, uno de los autores del estudio publicado en JAMA .
Un artículo editorial que acompañó el estudio señaló que la investigación provee la mejor evidencia hasta la fecha que apoya el control precompetitivo.