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París. AFP. El paso de la vida en el agua a la vida en la tierra requirió una lenta adaptación del cráneo, y no solo de los miembros, revela un estudio publicado en Nature .
Investigaciones realizadas en fósiles de Tiktaaalik rosae , muestran que elementos del cráneo “que en otras épocas se creían vinculados a los animales que vivían en la tierra, eran en realidad las primeras adaptaciones para la vida en aguas poco profundas”, destaca el principal autor del estudio, Jason Downs, de la Academia Estadounidense de Ciencias Naturales.
El Tiktaalik rosae , que hace 375 millones de años se encontraba en una etapa de evolución entre los peces y los primeros animales capaces de caminar, era un predador que podía alcanzar tres metros de largo, con dientes afilados y una cabeza similar a la de un cocodrilo.
Fue descrito por primera vez en el 2006. Todavía poseía las características de los peces –una mandíbula primitiva, aletas y escamas– y al mismo tiempo un cráneo, un cuello, costillas y un comienzo de los miembros característicos de los animales terrestres.
Al examinar la región del cráneo, los investigadores destacaron la transformación de determinadas estructuras internas del Tiktaalik para permitirle moverse sobre el suelo y respirar aire.
“Pensábamos que la transición hacia el cuello y el cráneo fue rápida en la evolución, en gran medida porque carecíamos de informaciones sobre los animales intermediarios entre los peces y los animales terrestres”, destacó Neil Shubin, de la Universidad de Chicago. “El Tiktaalik llena perfectamente ese abismo morfológico: nos permite ver etapas intermedias y resolver la sucesión en el tiempo de esta transición compleja”, agregó.
“Este estudio nos recuerda que la transición gradual de una vida acuática a una vida terrestre requirió mucho más que la evolución de los miembros”, afirmó Ted Daeschler, de la Academia de Ciencias. “Demuestra que, a lo largo de esta transición, la cabeza de estos animales se volvió cada vez más sólida y, al mismo tiempo, más móvil”.
En el agua, los peces pueden fácilmente orientar su cuerpo hacia su presa. Pero en tierra, el cuello es necesario, ya que el cuerpo se apoya en los miembros que se posan en el suelo.