La información de seis millones de especies de flora y fauna presentes en Costa Rica estará al alcance de cualquier persona de forma libre y gratuita, gracias a una nueva plataforma digital.
A esta iniciativa se le conoce como Atlas de la biodiversidad de Costa Rica (CRBio) y está disponible en: www.crbio.cr
“El portal de CRBio es un sistema integrador de datos de múltiples instituciones. Permite consultar, visualizar, mapear y descargar los datos integrados de forma idónea para apoyar la investigación, educación y toma de decisiones en conservación de la biodiversidad”, comentó María Mora, coordinadora de la plataforma.
El portal contiene seis millones de registros y 50.000 imágenes. Se incluyen grupos de organismos como plantas, hongos y líquenes, anfibios, arácnidos, aves, insectos, mamíferos, moluscos, nematodos y reptiles.
Para hacerla accesible, la información está tanto en español como en inglés.
El proyecto fue coordinado desde el Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio), mientras que los fondos fueron aportados por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) y el Consejo Nacional para Investigaciones Científicas y Tecnológicas (Conicit).
Asimismo, colaboraron la Comisión Nacional para la Gestión de la Biodiversidad (Conagebio), el Museo Nacional de Costa Rica (MNCR), la Organización para Estudios Tropicales (OET), el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac), la Universidad de Costa Rica (UCR), el Laboratorio de Recursos Naturales y Vida Silvestre (Larnavisi) de la Universidad Nacional de Costa Rica (UNA) y los Observatorios de Aves de Costa Rica (CRBO).
Riqueza biológica. Para Mora, el contar con seis millones de registros robustece esta base de datos, lo cual es beneficioso porque orienta la investigación y sirve para sustentar decisiones de conservación.
“CRBio es una herramienta que facilita la predicción de propagación de plagas, el combate de los efectos del cambio climático, el análisis de especies invasoras, la selección zonas de protección y la ubicación de especies raras”, comentó Mora a la agencia EFE.
De hecho, el portal ofrece la posibilidad de visualizar mapas de distribución.
El usuario puede determinar un punto geográfico y observar la cantidad de especies en un radio de un kilómetro, cinco o diez.
Por ejemplo, en los cinco kilómetros alrededor del parque Morazán, en el casco central de San José, se reportan 2.013 especies. De estas, 1.119 son animales; 719, plantas; 139, hongos, y 36, protozoarios.
Asimismo, el portal cuenta con 5.000 fichas de especies que detallan la taxonomía y estado de conservación de las especies, pero también datos sobre su ciclo de vida, alimentación, reproducción y hábitat, entre otros.
“Con el módulo de fichas de especies, el usuario puede realizar búsquedas por nombre común y encontrar así la información que busca”, afirmó Mora.
Bases de datos. Los datos incluidos en CRBio fueron generados por 169 instituciones, ubicadas tanto en Costa Rica como en otros 34 países.
El 60% de ellos provienen del INBio; el 25%, del Laboratorio de Ornitología de la Universidad de Cornell (Estados Unidos), y el resto, de otras entidades.
“En CRBio se integraron 393 bases de datos”, destacó Mora.
El portal se nutre de los datos publicados en el Sistema Mundial de Información sobre Biodiversidad ( GBIF , por sus siglas en inglés).
De hecho, CRBio se actualiza mensualmente a partir de los datos incluidos en GBIF.
El software que utiliza el portal costarricense fue desarrollado por el Atlas de la Biodiversidad de Australia ( ALA ).
GBIF y ALA vienen trabajando en conjunto desde el 2012 para desarrollar capacidades y así adecuar esta tecnología a las necesidades de los países.
Se está trabajando en España, Francia, Reino Unido, Alemania, Portugal, Argentina, Brasil y, por supuesto, Costa Rica.
El compartir información y conocimiento biológico es la penúltima Meta de Aichi.
En total son 20 Metas de Aichi, las cuales forman parte del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD), el cual fue firmado por 193 países en 1992.