Al apostar por botellas de plástico reciclado, la empresa Florida Bebidas espera no volver a necesitar del petróleo para conseguir resina y hacer envases.
De esta forma, una botella podrá ser nuevamente botella, reiniciando así su ciclo de uso.
Además, la resina reciclada (PET) requiere menos agua y menos energía que la utilizada inicialmente.
Con esta medida, la firma pretende recuperar la mayor cantidad de plástico posible y así librar a los ríos, costas y ciudades de la contaminación.
“La aspiración es llegar a recuperar el 100% de los envases, pero la meta para este año es lograr recolectar poco más del 60%”, destacó Gerardo Miranda, gerente ambiental de Florida Bebidas.
Cerrar el ciclo. En este 2015, el programa de reciclaje de Florida Bebidas cumple 20 años. La firma cuenta con 350 centros en alianza con municipalidades, recolectores independientes, escuelas y colegios, asociaciones y comercios. También posee nueve puntos que son propios.
Su red de reciclaje abarca todo el país, gracias a ocho rutas de recolección.
A la fecha, la empresa ha logrado recuperar el 57% de los envases que saca al mercado. De estos, el 37% es PET.
Ese material se traslada a la planta de reciclaje, donde se le da un tratamiento. Luego, esa botella se muele, lava y desinfecta para cumplir con estándares internacionales de inocuidad.
Esa será la materia prima de las nuevas botellas. Según Miranda, se necesitan 1,2 botellas usadas para hacer una nueva.
“Necesitamos la ayuda de las personas, comercios, municipalidades y organizaciones para lograr recuperar la mayor cantidad de material. Implica un cambio cultural que hace que la gente vea un material reutilizable y reciclable donde antes veía basura”, señaló Miranda.
Para ello, Florida Bebidas apoya a centros de acopio y fomenta una cultura de reciclaje en las comunidades . Este año, en un plan piloto, trabajará con Alajuela y Santa Cruz, Guanacaste.