París, Francia
Con una matriz energética basada en energías renovables cuya cobertura alcanza el 99% de la población, Costa Rica da el ejemplo mientras otros países aún están viendo cómo migrar de la generación eléctrica a partir del carbón y el petróleo a una que utilice el agua, el sol y el viento.
El ministro de Ambiente y Energía, Édgar Gutiérrez, intervino en la sesión plenaria de la 21.ª Conferencia de las Partes (COP21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se celebra esta semana en Le Bourget, suburbio al norte de París, Francia.
"Al 2015, tenemos una matriz eléctrica absolutamente renovable y nos comprometimos en nuestra Contribución Prevista Nacionalmente Determinada a mantener una capacidad instalada eléctrica renovable al 2030", enfatizó Gutiérrez.
Asimismo, el ministro agregó: "Desde ese pequeño país, les decimos que sí es posible un acuerdo ambicioso que permita cumplir la meta de no superar el aumento global de la temperatura en más de 1,5 a 2 grados Celsius y, en el largo plazo, alcanzar emisiones netas cero. También venimos a señalar que esto debe lograrse con equidad, integrando la defensa de los derechos humanos, la igualdad de género y la corresponsabilidad intergeneracional".
"Estamos en el umbral de un acuerdo histórico que definirá el nuevo régimen internacional del cambio climático. No hay margen para omisiones ni equivocaciones. Nos hallamos ante la oportunidad de replantear el modelo de desarrollo que queremos para el futuro. Se requiere superar cualquier mezquindad o cálculo económico para forjar una meta a largo plazo que comprometa países y ciudadanos en iguales condiciones. Los criterios particulares de conveniencia o coyuntura no pueden ser la guía que nos convoque en este acuerdo", destacó Gutiérrez en su discurso.
Energía, el gran reto. Ya lo señaló el Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) en su quinto informe de evaluación, el sector energético es el único capaz de dar un "vuelco de timón" y, con ello, generar un impacto de gran calibre.
De hecho, IPCC calcula que intervenir el sector energético podría significar una reducción entre 40 y 70% de las emisiones de gases de gases efecto invernadero. Es más, la meta es lograr una matriz energética 100% renovable para 2050 y esto conlleve a neutralizar las emisiones al 2100.
Para Amar Bhattacharya, investigador de Brookings Institution y expositor en el evento Earth to Paris que tiene lugar en la capital francesa, el crecimiento económico de los países está fuertemente relacionado a la energía.
Cuando un país logra separar el crecimiento económico de la emisiones de carbono, a eso se le llama descarbonización.
"La descarbonización dependerá de lo que hagamos en los próximos 20 o 30 años", dijo Bhattacharya.
Por su parte, Guido Schmidt -director ejecutivo de Sustainable Development Solutions Network- esa descarbonización se asienta en tres pilares: la migración a una matriz energética 100% renovable, lograr la eficiencia energética y reemplazar los combustibles fósiles por electricidad en el sector transporte.
Costa Rica ha avanzando en el primer aspecto y las metas propuestas en el marco de la contribución nacional o INDC presentada ante Naciones Unidas se enfocan a los otros dos pilares. El objetivo está trazado a disminuir en un 50% las emisiones al 2050 y llevarlas a cero en el 2100.
El tren eléctrico interurbano, lograr un transporte público más eficiente y limpio que desincentive el uso de automóviles, rediseño de rutas con carriles exclusivos para buses y un cambio tecnológico en la flota de vehículos privados para que estos sean eléctricos o híbridos son parte de las medidas contempladas por el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) para cumplir el INDC.