Los conceptos de “residuos cero” y “economía circular” cada vez toman más importancia en Costa Rica, pues el cambio climático evidente no distingue un territorio de otro y las acciones que se pongan en marcha son relevantes para revertir, en lo posible, sus efectos.
Para contribuir en esa reflexión, La Nación realizó un foro este martes 6 de junio, durante el cual representantes de empresas como Coca-Cola, Nestlé, Fifco, Ecoins, Dos Pinos, Pozuelo, Geocycle, Kimberly-Clark y Ever Green analizaron la situación actual del país y las medidas que realizan desde su campo.
También estuvieron presentes funcionarios del Ministerio de Salud, Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) y de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL), quienes se encargaron de revisar los avances frente a los parámetros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la economía circular. El evento se puede repasar en el siguiente enlace: Foro Residuos Cero.
LEA MÁS: Sostenibilidad se convierte en buen negocio para productores
La actividad se inició con una explicación de la situación de Costa Rica, realizada por Eugenio Androveto, director de Protección Radiológica y Salud Ambiental del Ministerio de Salud.
El funcionario recordó que en el país solo se recupera el 1,6% de los residuos; dato que los voceros empresariales cuestionaron pues aseguran que el porcentaje debe ser mayor.
“San José es la provincia que más recupera, seguida de Alajuela y Limón. Pero entonces, ¿qué es lo que está pasando en la zona rural? Bueno, si hay grupos organizados, ellos tienen que recuperar y deben traer hasta el Valle Central sus residuos, entonces sus ganancias se van en el peaje”, dijo Androveto.
Aseguró que Salud está generando una política de gestión integral de residuos, donde el principal eje es la apertura hacia nuevas tecnologías.
El representante de Salud adelantó que a finales de junio saldrá a la luz una estrategia de economía circular.
De acuerdo con William Segura, de Coca-Cola, Costa Rica va por buen camino; pero falta mucho por recorrer. “Falta conocer la nueva reglamentación que las instituciones públicas dicen que van a sacar. Falta mucho por hacer, pero es un camino que hay que recorrer entre todos”, aseveró.
Con Segura coincidió María Pía Robles, directora de Relaciones Corporativas de Fifco, quien invitó a las personas a salir de la zona de confort y hacer un proceso de reflexión sobre qué están haciendo las empresas y los ciudadanos en el tema.
“En resumen, ¿cómo hago para tener un menor impacto y sabiendo que esto no va a cambiar en un corto plazo? ¿Cómo me adapto para seguir operando?”, planteó Robles.
Por su parte, Elizabeth Valverde, especialista en Asuntos Públicos y Corporativos de Nestlé, exaltó que la educación para el consumidor en el tema es muy importante, y por esa razón, la empresa tiene diferentes pilares enfocados en eso.
“El pilar número tres, que es de rediseñar, es básicamente ser pioneros en materiales que sean sostenibles y con un menor impacto en el ambiente. Estamos haciendo pruebas con el primer plástico flexible”, mencionó Valverde.
Para Carlos Cordero, director de la Secretaría de Planificación Sectorial del Minae, es un tema que por su gravedad debería ser obligatorio para todos porque “sin sostenibilidad ambiental no hay sostenibilidad económica, por lo que Costa Rica debe tomar acciones urgentes”.
“Es una responsabilidad de todas las partes de la sociedad, difícilmente solo una parte tenga la respuesta. (...) La hoja de ruta en la parte ambiental es compleja, pero la mayor parte ha sido satisfactoriamente cumplida. Hay algunos pendientes, como el proyecto de ley ‘el que contamina paga’, que está en discusión y se debe introducir en la legislación nacional para cumplir con la OCDE”, afirmó Cordero.
LEA MÁS: Residuos cero en Costa Rica: ¿Para dónde va el país?
En la actividad también estuvo presente la directora de la UNGL, Karen Porras, quien aceptó que hay territorios que deben mejorar su gestión de residuos, pero los gobiernos locales son muy amplios.
Porras aseguró que los gobiernos locales han mostrado mejoras desde la creación de Ley de Gestión Integral de Residuos, pero admitió que hay diferencias en el cumplimiento.
En su criterio, se debe buscar una opción para “premiar” a consumidores y empresas con buenas prácticas en el manejo de residuos.
Todos los participantes coincidieron en que las estrategias deben ser organizadas y ejecutadas por todos los sectores, pues no es una responsabilidad solo de las instituciones.
Según el Banco Mundial, si no se promueve con éxito una política global de residuo cero, la cantidad de desechos alcanzaría los 3.400 millones de toneladas en 2050 y el mundo no tendría forma de responder al tema.