“La población en general, sabe la importancia de la reforestación, porque desde hace muchos años hay una campaña para mostrar la trascendencia de los árboles. Ahora, ¿qué pasa con los corales? tienen el mismo valor, pero no estamos tan familiarizados con ellos de la misma forma”.
Así describe Jeremy Vargas, director audiovisual, el reto que tiene el país de cocienciar a sus habitantes sobre el deterioro que sufren los arrecifes de coral, tanto en las aguas de Costa Rica, como en el resto del mundo.
De ahí que el colectivo Pelagos, del cual forma parte Vargas, decidiera unir esfuerzos con la organización Raising Coral, para crear el corto documental titulado ‘Simbiosis’, que retrata la problemática que enfrentan los corales y los esfuerzos de un grupo de científicos, para restaurarlos.
“La idea del documental es que las personas se puedan identificar con los corales y con los personajes que están restaurando los arrecifes”, expresó Vargas.
La producción audiovisual se estrenará este viernes en el cine Magaly, durante una función especial a las 10 a. m. que también servirá como marco para el lanzamiento de la campaña denominada ‘1.000 corales por Costa Rica’.
Con esta iniciativa, Raising Coral busca recaudar fondos suficientes, para cultivar 1.000 corales de múltiples especies y plantarlos arrecifes del golfo Dulce, en Golfito, que se encuentren dañados.
“Lo que uno busca con la restauración de arrecifes coralinos es acelerar el crecimiento que naturalmente los corales podrían tener. Trabajamos con viveros bajo el agua, les quitamos competencia y creamos las condiciones perfectas para su desarrollo. Posteriormente llevamos los corales al arrecife y con esto podemos acelerar la recuperación del sitio”, explicó Tatiana Villalobos, investigadora de Raising Coral.
El evento también marcará el lanzamiento oficial del libro ‘Colares Mágicos’, de la reconocida escritora de Lara Ríos; se trata de un cuento ilustrado que relata las aventuras de dos niños en los arrecifes de Costa Rica.
Acercar a las personas a los corales
La campaña también espera llevar el documental a otras salas de cine y a distintas zonas del país, por medio de proyecciones en escuelas, donde expertos puedan interactuar con grandes y pequeños para educar a la población en cuanto a la función biológica que cumplen los corales y las amenazas que enfrentan, en parte producto de las actividades humanas
“Porque cuando la gente conoce algo, es cuando lo cuida”, dijo Vargas.
Los arrecifes de coral albergan la cuarta parte de todas las especies marinas, incluyendo más de 4.000 tipos de peces. Además, son barreras rompe olas naturales, evitan la erosión, estabilizan el terreno de las costas, ayudan a producir la arenas que forma las playas y constituyen espacios de recreación humana.
Sin embargo, se encuentran en peligro por factores como la sobreexplotación de los océanos, la contaminación y el cambio climático. Este último, atizado por el Fenómeno del Niño, que implica variaciones en la temperatura del mar del Pacífico.
Al estresarse por el calentamiento del agua, los arrecifes coralinos expulsan las algas que los habitan, las cuales les proporcionan los nutrientes necesarios para su sobrevivencia. Este fenómeno, denominado como blanqueamiento, los despoja de sus colores y los convierte en esqueletos de calcio, dejándolos inservibles.
La meta
La iniciativa espera recaudar $35.000 (aproximadamente unos ¢21.388.850). Por ello invitan tanto a empresas privadas como individuos a sumarse a la campaña y hacer sus donaciones por medio del sitio web: https://www.raisingcoral.org/donate
“Nos propusimos que de verdad esto sea de Costa Rica, que las empresas puedan donar, que puedan hablar de lo que están haciendo en restauración de arrecifes coralinos. En que el Gobierno se motive en la parte de legislación, de organizar, porque es una actividad (restauración de corales) que de aquí en adelante se va a disparar, entonces, necesitamos regulación”, indicó Villalobos.
El proyecto busca generar una guía, a partir de la experiencia de los 1.000 corales que se planean sembrar en el golfo Dulce, capacitar a las comunidades costeras y replicar la experiencia en Papagayo.