Las emisiones generadas por el transporte aéreo que usaron los participantes internacionales para trasladarse de sus países de origen hasta Costa Rica, constituirá la mayor parte de la huella de carbono de la PreCOP25.
En la reunión climática, que inició el martes y culmina este jueves, participan representantes de 86 países. Entre locales y visitantes, la asistencia al evento, celebrado en el Centro Nacional de Convenciones, en Belén, Heredia, se estima en unas 1.500 personas.
“Tenemos mucho cuidado de tener mapeadas las rutas de los visitantes internacionales para poder hacer luego el cálculo y sacar de ahí las toneladas de dióxido de carbono que significa el transporte de estas personas”, explicó a La Nación Pablo Castro, director del Centro para Sostenibilidad Urbana.
Esta fundación se encuentra apoyando a la Cancillería y la Dirección de Cambio Climático (DCC), del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), en la gestión ambiental de esta cita organizada por Costa Rica y que busca allanar el camino hacia la Cumbre del Cambio Climático (COP25), que tendrá lugar en Chile, en diciembre próximo.
Nueva metodología
La PreCOP25 busca certificarse como un evento carbono neutral y para ello debe medir todas sus emisiones. Sin embargo, no existe una metodología internacional que sirva de guía para hacer estas cuantificaciones, de acuerdo con Laura Mora, asesora técnica de la DCC.
“Es un proceso piloto que se está llevando a cabo desde la DCC, con el Programa País de Carbono Neutralidad 2.0, porque estamos desarrollando la categoría para que los eventos puedan ser catalogados como carbono neutral de una manera oficial y confiable”, dijo.
La PreCOP25 es el cuarto evento en el que se aplica la metodología, a modo de prueba.
“Han salido muchos eventos, que no han sido apoyados por nosotros, que dicen que son carbono neutral, pero decirlo y que alguien realmente lo demuestre, hay mucho más allá”, indicó Mora.
El procedimiento ya se encuentra en proceso de validación oficial, antes de lanzarla al público en general. Se basa en el estándar regional INTE B5 y la norma ISO 14067.
Todo el proceso cuenta
La cuantificación se basa en un enfoque de ciclo de vida del evento, que va desde que se conceptualiza, la planificación, el durante y el después.
Para realizar este proceso, primero se tiene que determinar las posibles fuentes de emisiones, medirlas, hacer planes para reducirlas de alguna manera y luego compensarlas.
“Es complejo, en el sentido de que la cantidad de fuentes (de emisiones) son muchas, porque, una persona es una fuente de emisiones, principalmente por la forma como se transporta al evento”, dijo el director del Centro de Sostenibilidad Urbana.
Por ejemplo, para el tema de transporte, se incluyó una consulta en el formulario de registro digital, en el que las personas tenían que indicar su procedencia, la ruta a tomar (o escalas internacionales) y el tipo de combustible.
En el recinto se volvió a hacer la consulta, pero en papel, para contar con un control cruzado de la información. También se trabaja con los proveedores para obtener la información necesaria para hacer el inventario.
Reducción y compensación
Con respecto a las medidas de reducción, se procuró hacer un manejo adecuado de los residuos orgánicos de la alimentación, a través de dos acciones concretas.
Primero, estamos trabajando con la Fundación Plato Lleno, ellos vienen después del almuerzo, empacan lo que sobra (que no haya sido manipulado y se encuentre en buen estado) y se lo llevan para entregar a hogares de ancianos, centros de atención para personas en condición de calle, etcétera", indicó Castro.
También, se procuró planificar la cantidad apropiada de alimentos, para evitar el desperdicio.
En segunda instancia, los desechos son cedidos a una porqueriza para alimentación animal, en lugar de llevarlo a un botadero, se pudra y produzca gas metano.
El Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (Inteco), estaría a cargo del proceso de verificación. Se espera contar para finales de octubre, con los informes e inventarios para que el ente los revise.
La decisión de hacer el evento en el Centro de Convenciones, también forma parte de las medidas de sostenibilidad, ya que el recinto cuenta con la certificación internacional LEED, cuyas siglas en inglés significan: Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental.
En cuanto a la compensación, una vez que el inventario se cierre e Inteco apruebe ese cálculo inicial se procede a hacer la compra de la compensación de emisiones del evento, lo cual se realizaría en asocio con el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (Fonafifo).