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La fachada del Teatro Popular Melico Salazar será sometida a trabajos de restauración.
La tarea comenzará el 15 de julio con la colocación de grandes andamios.
Con el proyecto se procura conservar la valiosa estructura, afectada por la contaminación, pericos que afilan sus picos contra el edificio y la antigüedad.
Las obras a realizar en las fachadas sur y este del teatro incluirán limpieza y pintura, restauración de los frisos exteriores, arreglo de las verjas e iluminación.
Al final de los trabajos, que concluirán en diciembre, la fachada del Melico Salazar tendrá nuevos colores y estará completamente iluminada por las noches.
Los trabajos serán dirigidos por los arquitectos Andrés Fernández y José E. Garnier.
Para la restauración de la estructura el Gobierno cuenta con un presupuesto superior a los $210.000 (más de ¢100 millones).
El dinero proviene de un superávit del Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes, una donación de 38.000 euros (unos ¢20 millones) del Gobierno de Alemania y otros aportes significativos de la empresa privada.
El plan fue presentado ayer por el ministro de Cultura, Guido Sáenz, el director ejecutivo del Melico, Giancarlo Protti, y el embajador de Alemania, Volker Fink.
Protti aclaró que el teatro funcionará normalmente durante los meses que duren las obras.
Más. En una segunda etapa, para la cual resta aún buscar los fondos, habrá una mejora del interior del edificio.
En esa propuesta trabajó un grupo de egresadas de la Universidad Véritas, quienes proponen cambio de alfombras, instalación de una tienda en la recepción del teatro y reacomodo del espacio para las oficinas.
El Melico Salazar es patrimonio histórico-arquitectónico.
Fue inaugurado el 6 de marzo de 1985 donde estuvo el antiguo teatro Raventós.
El edificio tiene espacio para 980 espectadores. El año pasado acudieron 68.000 personas a presenciar unos 200 espectáculos.
