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El nuevo Pasaje Jiménez estaría listo alrededor del 2008. Aún no están los planos definitivos, pero la Urbanizadora La Laguna ya busca a los posibles clientes de este nuevo espacio pensado para oficinas, comercio y un hotel pequeño.
“El objetivo es que ahí se instalen empresas que también tengan una preocupación por el ambiente”, dijo su creador, el arquitecto Jaime Rouillon.
El diseño incluye las variables ambientales de la zona, de tal manera que la contaminación, el ruido, el calor y la humedad no afecten a los visitantes, pero que tampoco se requiera un amplio gasto de energía.
Una “doble piel” en su exterior, una forma que se adapta a los vientos de la zona, y materiales que permiten o bloquean el paso de la luz solar según sea el caso, son solo algunos de los elementos que Rouillon combina en este edificio de 12 pisos y 2 sótanos, incluidos parqueos.
Dentro del marco de San José Posible, el proyecto de recuperación de la capital, el arquitecto espera que este edificio se convierta en un “detonante” que impulse, en esta zona, intervenciones públicas y privadas.
El nuevo Pasaje Jiménez se plantea como un estímulo para el cambio: “Este edificio debe ser uno de los hitos comerciales y financieros más importantes de la capital que abra camino para una nueva visión de inversión inmobiliaria en San José”, manifestó Rouillon.
